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Así fue la detención en Portugal de Natalio Grueso, el prófugo asturiano del 'caso Niemeyer'

Agentes de la UCO de la Guardia Civil española y de la Policía Judiciaria portuguesa trasladan a Natalio Grueso tras ser detenido en un pueblo costero del Algarve.

Pilar Campo

Oviedo/Uviéu —
11 de diciembre de 2025 11:03 h

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El Equipo de Huidos de la Justicia de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, en colaboración con la Policía Judiciaria de Portugal, detuvo el pasado 4 de diciembre al ex director general del Centro Cultural Internacional Óscar Niemeyer de Avilés, Natalio Grueso, que permanecía prófugo de la Justicia desde 2023, cuando el Tribunal Supremo (TS) ratificó la condena de ocho años de cárcel por delitos continuados de malversación de caudales públicos y falsedad en documento mercantil y societario, tal y como adelantó elDiario.es Asturias.

La Guardia Civil ha difundido este jueves el vídeo de la detención del ex gestor cultural, quien fue reconocido cuando se encontraba en la localidad de Olhão, un pueblo pesquero ubicado en el Algarve portugués, al sur del país luso, donde procuraba pasar desapercibido, manteniendo un “perfil bajo” para seguir con discreción su rutina diaria.

Entre los delincuentes más buscados

Natalio Grueso había sido incluido en la lista de delincuentes fugados a raíz de que el tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Asturias, que le impuso la condena en junio de 2020 y posteriormente ratificada por el Supremo, solicitara que contra él se dictara una orden de detención internacional para que, una vez localizado, fuera detenido e ingresado “inmediatamente” en un centro penitenciario.

Además de los ocho años de cárcel, los magistrados de la Audiencia impusieron al ex gestor cultural una pena de inhabilitación para la contratación con las administraciones públicas o entidades del sector público durante ocho años.

Vida normal en Portugal

Eldiario.es Asturias ha tenido acceso a toda la documentación remitida desde Portugal a las autoridades españolas donde, inicialmente comunicaban la localización y detención, y posteriormente anunciaban que sería entregado el próximo lunes, día 15, en un control fronterizo.

A continuación reproducimos el vídeo que ha sido difundido por la Guardia Civil, donde se puede apreciar cómo Natalio Grueso estaba haciendo vida normal, ajeno a la operación policial que se iba a poner en marcha minutos después para su arresto.

Un vídeo que también ha sido difundido a través del perfil oficial del instituto armado, entre otros, en este post de la red social X.

Entrega en un control fronterizo

Entre esta documentación, las autoridades portuguesas comunican que la entrega de Natalio Grueso se hará efectiva en el Centro de Cooperación Policial y Aduanera (CCPA) de Caya Elvas, en Badajoz. En octubre de 2022, el ministro del Interior español, Fernando Grande- Marlaska y el ministro de Administración Interna de Portugal, José Luís Carneiro, acordaron perfeccionar sus mecanismos de cooperacion policial transfronteriza entre ambos países.

Natalio Grueso ha solicitado ser trasladado a un centro penitenciario en Madrid y probablemente será conducido hasta la cárcel de Soto del Real.

A disposición judicial

El ex gestor cultural había estado internado como preso preventivo en la cárcel de Asturias, adonde no quiere volver porque, según explicó su propio abogado defensor a este diario en una entrevista concedida cuando se encontraba ya huido de la justicia, “no se había fugado, solo quería proteger su vida”.

Tras su detención, las autoridades portuguesas solicitaron oficialmente la comunicación de la orden europea de detención al Tribunal da Relacao de Évora, que llevaba la causa, así como que “no cese la alerta hasta que la entrega se haya hecho efectiva y el reclamado haya sido puesto a disposición judicial”, tal y como recogió este periódico el pasado día 5 de diciembre.

¿Por qué fue condenado Natalio Grueso?

El caso Niemeyer da nombre a la trama sobre la emisión de facturas falsas o manipuladas durante la gestión de Natalio Grueso al frente de la Dirección General del Centro Cultural Internacional Óscar Niemeyer, ubicado en la localidad asturiana de Avilés.

Natalio Grueso no estuvo solo en el banquillo de los acusados de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial. Junto a él se sentaron su exmujer, Judith Pereiro, el exsecretario de la Fundación Niemeyer, el abogado José Luis Rebollo, el exagente de Viajes El Corte Inglés, José María Vigil y el exjefe de Producción del Centro Niemeyer, Marc Martí.

Uno de los detalles que más llamó la atención durante el juicio fue la actitud adoptada por el propio Natalio Grueso que se pasó la mayoría de las sesiones con un libro en la mano que leía a ratos desde el propio banquillo de los acusados.

Natalio Grueso y su exmujer Judith Pereiro, en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Asturias, durante el juicio, en una imagen de archivo.

Desplazamientos y hoteles

La sentencia ratificaba como hechos probados que Natalio Grueso, director general de la Fundación de 2006 hasta 2012, generó gastos ajenos a los fines de la Fundación Niemeyer durante todo el tiempo que duró su relación laboral, “disponiendo de sus fondos en beneficio propio, de sus familiares, amigos y terceros de su entorno, como si de su propiedad fueran, en detrimento de la Fundación Niemeyer”.

Con el apoyo del coacusado José María Vigil, a quien unía una relación de amistad, también ocultó gastos de desplazamientos y estancias hoteleras de familiares y allegados con facturas falsas o alteradas a nombre de trabajadores de la Fundación o por conceptos ficticios.

Los otros coacusados

Tras recurrir en casación, el Tribunal Supremo (TS) confirmó el relato de hechos. Ratificó la pena de ocho años de prisión impuesta en 2020 a Natalio Grueso, los dos años de cárcel impuestos al exsecretario de la Fundación, José Luis Rebollo, por delito continuado societario, y rebajó de siete años y seis meses a seis años de prisión la condena que le había sido impuesta al tercer condenado en la causa, José María Vigil, exagente de Viajes El Corte Inglés, por malversación, falsedad y estafa.

La Audiencia Provincial absolvió a la exmujer de Grueso, Judith Pereiro, y al exjefe de Producción del Centro Niemeyer, Marc Martí, de un delito continuado de malversación en concepto de cómplice y un delito de malversación respectivamente.

La petición de indulto

Con la sentencia firme, Vigil decidió ingresar voluntariamente en el Centro Penitenciario de Asturias. Rebollo logró la suspensión de la ejecución de la pena durante tres años y Natalio Grueso emprendió una nueva batalla judicial para evitar su prisión por una doble vía: por un lado, presentó una petición de indulto ante el Ministerio de Justicia refrendado por numerosas personalidades del ámbito cultural y por otro empezó a recurrir ante la Audiencia Provincial para pedir la suspensión en tanto se resuelva el indulto.

En su recurso de apelación, argumentaba que tenía “razones de peso” entre las que resaltaba la “utilidad y conveniencia pública y la protección de la vida e integridad física y mental” dado que la inmediata ejecución de la pena “haría ilusoria la finalidad perseguida por la gracia solicitada”.

El recurso de apelación

En este recurso de apelación, al que también ha accedido elDiario.es Asturias, la defensa incidía en la “contribución al desarrollo y el impulso de la esfera cultural española” de Natalio Grueso y recordaba que ya había hecho frente a la responsabilidad civil y a las multas.

Además, aseguraba que el perjuicio económico ocasionado a la Fundación Niemeyer ascendía a 78.819 euros, que ya había abonado y que, según la defensa, “supone el 0,17 por ciento del gasto total gestionado” por el exdirector general, que superó los 50 millones.

Ahora, con la detención y posterior ingreso en prisión de Natalio Grueso se abre un nuevo capítulo en el denominado 'caso Niemeyer'.

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