Camps barajó un plan para abrir 40 embajadas valencianas por el mundo
Los diferentes gobiernos valencianos del expresidente Francisco Camps (2003-2011) estuvieron trufados de proyectos megalómanos. Algunos salieron bien -no sin polémicas por los excesivos sobrecostes y las sospechas de corrupción-, otros fueron ruinosos y muchos otros acabaron en los cajones de las dependencias de la Generalitat.
Entre los que durmieron el sueño de los justos tras la brutal crisis económica de 2008 que el propio Camps nunca se atrevió a reconocer hasta su salida en julio de 2011 se encuentra el plan de embajadas valencianas por todo el mundo.
De aquel mapa que diseñaron en la Conselleria de Justicia y Administraciones Públicas todavía quedan en los archivos de la Generalitat los emplazamientos que iban a tener esas oficina de atención al ciudadano -bautizadas como PROP por la Generalitat-. La propuesta no se llegó a hacer efectiva ni tampoco llegó a ser presupuestada ya que en el verano de 2011 y tras haber ganado la elecciones autonómicas Francisco Camps tuvo que dimitir como presidente por el caso de los trajes pagados por la trama Gürtel, causa de la que fue absuelto.
Su sucesor Alberto Fabra llegó a una administración quebrada, sin ingresos y con numerosos “pufos”, por lo que tuvo que parar todo tipo de proyectos anteriores -incluso renunció a la Fórmula 1- y cerrar numerosas fundaciones y empresas públicas. En la imagen, Camps aparece con Bill Gates con quien anunció una sede de Microsoft en Torrevieja (Alicante). Tras la foto, nunca más se supo.
Según estos mapas que reproduce hoy eldiario.es y que se encuentran archivados en las dependencias del antiguo PROP de la calle El Miguelete de València, la intención de la Conselleria de Justicia era la de abrir hasta 40 embajadas valencianas por el mundo. 27 en América Latina, ocho en Europa, tres en Asia y dos en África. Teóricamente los PROP-Ext iban a aprovechar algunas oficinas del IVEX (Instituto Valenciano de la Exportación), aunque en otros casos serían de nueva creación.
Llama la atención las 13 oficinas que se pretendía abrir en Argentina, un país donde el Ejecutivo de Camps tendió muchas relaciones con los emigrantes valencianos, y cinco en EE UU. En Europa el despliegue era menor, con sedes en siete países de la UE y Rusia. Cabe recordar que el Ejecutivo de Camps disponía en Bruselas de una embajada para las instituciones europeas en la que llegaron a trabajar más de veinte personas.
Por su parte, en España la intención del Ejecutivo también era desplegar oficinas PROP para atender a los valencianos que residen en otras autonomías. Planteaba tener sedes en Barcelona, Madrid, Sevilla, Pamplona, Mallorca o Burgos.
Pero este no fue el único plan exterior que frustraron a la Generalitat durante los años de gobierno del PP. A su llegada y por la brutal crisis Alberto Fabra cerró en abril de 2012 todas su oficinas comerciales en el exterior, dependientes del Ivex, para integrarlas en la red del Estado, concretamente, 11 en oficinas comerciales del Ministerio de Economía y Competitividad y dos en consulados.
Las criticadas embajadas catalanas por el mundo iban a tener su réplica en el plan del Gobierno del PP de Francisco Camps.