Puig: “La auditoría ciudadana está en marcha”
“La auditoría ciudadana está en marcha”, ha asegurado este jueves el president de la Generalitat, Ximo Puig, en la primera sesión de control de la legislatura en las Corts Valencianes. Puig ha respondido a todos los grupos menos el suyo, el socialista, que a diferencia de lo que era habitual en el PP ha optado por no invertir tiempo en preguntar a su propio líder. Se refería a la deuda acumulada por la Generalitat de más de 40.000 millones durante los gobiernos del PP, que el Acord del Botànic entre PSPV-PSOE, Compromís y Podemos, plantea auditar en uno de sus puntos. Sin embargo, esa revisión de la gestión anterior para “reclamar responsabilidades” la ha ampliado a los casos judiciales por asuntos de corrupción, y se ha comprometido a que la Generalitat se persone en procedimientos como los de Valmor (por la organización de la Fórmula 1), la compra de vehículos en la empresa pública Vaersa, el supuesto fraude en el instituto tecnológico Aido, y el propio caso Gürtel, en aquellas piezas en las que sea todavía posible porque no se haya decretado la apertura de juicio oral.
La primera sesión de control al Consell llega tarde, según la portavoz del PP, Isabel Bonig, que ha criticado que hayan pasado “110 días” desde que Ximo Puig formó gobierno. Sin embargo, la que ha llegado tarde ha sido la propia Bonig, atrapada en un atasco circulatorio que ha llevado a retrasar el inicio una hora. En su nuevo papel de oposición, la líder popular, fiel a su estilo, ha entrado al debate como si acabara de salir de los toriles. “Desde que está usted en la presidencia se han destruido 21 puestos de trabajo al día”, le ha reprochado a Puig, a quien ha acusado de perder el tiempo llorando por la herencia recibida. “No llore, lidere el cambio, demuestre que es posible otra formar de gobernar, como ha prometido”.
El presidente se lo ha tomado con sorna. “Si a los 100 días está así de alterada, no sé qué pasará a los 1.000 días”, ha bromeado el jefe del Consell, que ha acusado al PP de haber dejado en la Administración autonómica “un campo de minas”. “Estamos en un tiempo de reparación y recuperación”, ha reiterado Puig, que ha aludido a las víctimas del metro, los dependientes y los inmigrantes sin papeles excluidos por los populares de la sanidad pública. Aunque la portavoz de Ciudadanos, Carolina Punset, ha llamado a Puig a “no judicializar” la reivindicación de una mejor financiación autonómica -“es un pleito inútil”, ha afirmado-, Puig ha criticado con dureza al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, por ningunear a la Generalitat y ha asegurado que apuesta por el diálogo pero está dispuesto, si no lo hay, a “luchar hasta el final”.
Relaciones del Consell de Fabra con la Púnica
El portavoz de Compromís, Fran Ferri, ha dado pie al presidente a hablar de la deuda de la Generalitat. Los valencianos han pasado de una deuda per cápita de 693 euros en 1995 a 8.115 euros, ha recordado el representante de los socios del PSPV-PSOE en el Consell. Y ha añadido que una parte de esa deuda es culpa de la política de despilfarro y de la corrupción. Ferri ha esgrimido un documento que revela cómo el Consell de Alberto Fabra acordó pagar en abril de 2014 180.000 euros a la empresa Construcciones Gomuñoz por obras en un centro social de Gandia. Se trata de la empresa que supuestamente pagó facturas del PP gandiense con Alejandro de Pedro, uno de los principales imputados de la trama Púnica. “No vamos a hacerlo por afán de revancha sino porque los ciudadanos tienen derecho a saber qué ha pasado”, ha explicado Puig al desgranar las iniciativas que el Consell ha puesto en marcha para completar la revisión de las cuentas. “La auditoría ciudadana está en marcha”, ha concluido.
200.000 euros del caso Blasco recuperados
Pero el gobierno de Puig irá más allá de la auditoría. Antonio Montiel, líder de Podemos, ha recordado el caso de José Luis Olivas, que fue presidente de la Generalitat y también de Bancaja, para plantear que el Consell se persone en casos como el de Bankia, aunque se hayan producido en un ámbito ajeno a la Administración pública. Puig ha reiterado que, en su opinión, el hundimiento de las cajas de ahorros y del sistema financiero valenciano es de una gravedad comparable a la de la batalla de Almansa y ha respondido a Montiel que “si hay alguna posibilidad por parte de la Generalitat de defender los intereses de los valencianos, se personará”. El presidente del Consell ha aprovechado para anunciar que la Generalitat ha recuperado 200.000 euros procedentes del caso Blasco, por el fraude en las ayudas a la cooperación, y ha añadido que la Generalitat se personará en casos como Valmor, Aido y Gürtel con la intención de “recuperar hasta el último euro”.
Montiel ha anunciado en la réplica que Podemos está en condiciones de llevar en noviembre a la Cámara un anteproyecto de la Agencia contrael Fraude y la Corrupción, un organismo que ha de hacer “la tarea preventiva” para evitar los casos de corrupción. Según informó el Consell tras la sesión, en estos momentos la Generalitat está personada en los casos Blasco y Emarsa, en la investigación de un posible fraude en los conciertos educativos, y en el caso Nóos, este último solo por la vía civil. Se dispone a personarse en el caso Valmor, aunque está pendiente de si la evolución de la instrucción acaba afectando a los integrantes del anterior Consell para calibrar si eso dificulta su papel. Y se personará en los casos de Vaersa y Aido. Por lo que se refiere el caso Gürtel, lo hará en aquellas piezas que no estén ya en la fase de juicio oral.