Levante-EMV, obligado a readmitir a un periodista despedido como “represalia” por sus noticias y libros sobre corrupción

Un juzgado de lo social de Valencia ha obligado al periódico Levante-EMV a readmitir al periodista valenciano Francesc Arabí, al que despidió en diciembre de 2023, cuando el director del medio era José Luis Valencia, según ha anunciado el profesional en su cuenta de X. El juez considera que se han “vulnerado los derechos fundamentales a la libertad de expresión e información” al considerar el despido por parte del rotativo de la familia Moll como una “represalia” por la publicación de varios libros sobre la corrupción del PP de Eduardo Zaplana, “aunque también de PSPV y Compromís”, explica el profesional.

Su vuelta se produjo en una etapa muy convulsa en el periódico, puesto que el nuevo director, José Luis Valencia, -nombrado a mediados de 2022- había virado la línea editorial del periódico de una manera exagerada tras la llegada al Gobierno de la Generalitat de Carlos Mazón. El encaje entre Arabí, un reconocido periodista y azote contra la corrupción de los Gobiernos de Eduardo Zaplana y Francisco Camps, y José Luis Valencia no fue bueno y terminó con el despido del periodista en diciembre de 2023 por, según la empresa, razones económicas. El periodista denunció el despido como improcedente y alegó motivos ideológicos

La resolución explica que existen “indicios fundados” de que la rescisión del contrato estaba relacionado por lo publicado por Arabí, tanto en su primera etapa en Levante-EMV como en los libros 'Ciudadano Zaplana' o, sobre todo, 'Los tentáculos del truhan: la caída de Zaplana y la corrupción más allá del PP', de los que es autor el periodista. El tribunal considera “determinante” en su despido esta publicación, que el propio autor describe como “una excursión por las alcantarillas del poder político y económico; además de la radiografía de Zaplana y la corrupción 'más allá del PP', destapando también la del PSPV y Compromís”.

El auto reconoce que existen “indicios fundados” de que el despido obedeció a lo publicado por el redactor de Levante al sugerir que había existido una “alineación informativa” entre José Luis Valencia y el PP valenciano cuando éste dirigió El Periódico de Alicante o el Mediterráneo de Castellón. Arabí, que fue despedido el 1 de diciembre de 2023 (el único despido de los 81 redactores del periódico), dos meses después de su reincorporación, sostiene que llegó a juicio, el 5 de junio pasado, con el objetivo de defender su honor a pesar de las reiteradas y crecientes ofertas económicas de la empresa para intentar llegar a un acuerdo, la última de ellas a las puertas de los juzgados.

La resolución insiste en que es a la empresa a la que correspondía haber aportado una “justificación objetiva y razonable, suficientemente probada” de las razones del despido y que dicha elección, entre los 81 redactores existentes en ese momento, “no escondía una represalia a lo publicado por él”. La empresa, además de readmitir al trabajador, debe indemnizarle con 6.000 euros y abonarle los salarios dejados de percibir desde la fecha del despido hasta que la readmisión tenga lugar de modo efectivo.

La sentencia no es firme y ha sido recurrida por el periódico de la familia Moll ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.