El juzgado investiga el ataque con ácido a varios vecinos de Benimaclet en un homenaje a Guillem Agulló

Una docena de personas que participaban en un homenaje a Guillem Agulló, el joven antifascista asesinado por la extrema derecha en Montanejos en 1993, resultaron afectadas el pasado 19 de febrero por el lanzamiento de un líquido corrosivo desde una vivienda ubicada en el barrio de Benimaclet, motivo por el que presentaron la correspondiente denuncia.

Como informó elDiario.es, el Centro Social Terra, entidad con 22 años de arraigo en Benimaclet plenamente integrado en el tejido asociativo de este combativo barrio que saltó a la polémica recientemente al conocerse que un agente de la Policía Nacional se infiltró el colectivos vecinales y antifascistas de la zona, fue el organizador de la actividad.

Más de un mes después del lamentable suceso, se desconoce si se ha identificado al autor o autores de los hechos. Por este motivo, el senador de Compromís, Carles Mulet, ha preguntado al Gobierno en qué situación se encuentra el caso.

En su respuesta, el Ejecutivo central ha informado de que “en la Oficina de Denuncia y Atención al Ciudadano de la Comisaría de Distrito de Exposición, así como en la Comisaria de Tránsitos, se recogieron varias denuncias de perjudicados, poniéndose en conocimiento de la Autoridad judicial los hechos ocurridos”.

Asimismo, “desde el momento inicial en que se produjeron los hechos, se abrió una investigación policial, tramitándose atestado policial de fecha 27 de febrero de 2023, que fue remitido al Juzgado de Instrucción número 9 de Valencia, juzgado que conoce de la primera denuncia interpuesta por uno de los perjudicados”.

Según el relato de testigos presenciales, “dos policías subieron al edificio desde donde se había lanzado la sustancia, en la calle Reverend Tramoyeres, e inspeccionaron todos los pisos del edificio, de tres plantas”. Hubo únicamente “un vecino que no abrió la puerta, según nos dijeron”. Por supuesto, “el piso del vecino que no abrió la puerta era el que todos señalábamos con el dedo: estaba claro que nos lo habían tirado desde ahí”. Según este testigo, así se lo dijeron a los agentes, quienes, para su sorpresa, les contestaron: “Sabemos quién ha sido. Te puedo decir hasta el piso y la puerta”.

El parte de lesiones que una de las afectadas adjuntó a la denuncia, al cual ha tenido acceso este diario, afirmaba que “presenta eritema bien delimitado en pómulo izquierdo, párpado superior izquierdo y frente”. Además, “las lesiones que presenta en pómulo son circulares, de un centímetro de tamaño, dolorosas a la palpación” y el “párpado superior izquierdo doloroso a la palpación con leve inflamación”. El diagnóstico es “corrosión de región anatómica de grado no especificado” y se le receta Furacín pomada asociado a “quemadura química”.