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Las conclusiones de la comisión que investiga el robo de 4 millones en EMT València establecerán responsabilidades

Reunión de la comisión de trabajo que investiga el robo de 4 millones de la EMT

Carlos Navarro Castelló

Valencia —

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La comisión de trabajo abierta para investigar el robo de 4 millones de euros en el seno de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de València encara su recta final con el inicio de la redacción del documento de conclusiones, una labor que liderará la socialista Elisa Valía como presidenta del grupo de trabajo formado por los consejeros de la entidad, es decir, los concejales delegados por cada partido con representación en el Ayuntamiento (tres Compromís, dos PSPV, dos PP, uno Cs y uno Vox).

Este miércoles finalizaron las comparencencias en el seno de la entidad con las declaraciones por segunda vez del gerente, Josep Enric García, y la directora de gestión, María Rayón, quienes no aportaron excesivas novedades sobre el caso.

Valía explicó que redactará un primer borrador de conclusiones a partir de las diferentes comparecencias y que lo remitirá a los diferentes consejeros para que hagan sus observaciones y aportaciones.

La concejala del PSPV reconoció que será difícil que haya unanimidad en cuanto al contenido de las mismas, pero aseguró que intentará que exista el máximo consenso.

Además, afirmó que las con arreglo a lo declarado, el documento determinará hasta dónde deben llegar las responsabilidades, si es que debe haberlas, y advirtió que para el PSPV las conclusiones serán vinculantes, lo que puede implicar un nuevo encontronazo con sus socios de Compromís, ya que todo apunta a que los socialistas pedirán algún cese en la cúpula de la empresa.

Y es que los socialistas entienden que la ausencia de protocolos claros en la entidad sobre la delegación de tareas de control cuando los responsables de las mismas están de baja favoreció la comisión del robo y sobre todo, el que no se detectara, puesto que fue el banco el que alertó al propio gerente 20 días después de la primera transferencia, cuando ya se habían esfumado cuatro millones. Esta teoría también la comparten en parte los partidos de la oposición.

Desde Compromís, sin embargo, mantienen que los únicos responsables son la directiva despedida que cursó las transferencias fraudulentas, Celia Zafra, única de la empresa investigada de momento en la causa judicial, y de forma subsidiaria La Caixa, por hacer efectivos los pagos sin la firma electrónica mancumanada, procedimiento habitual.

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