El colegio negacionista de Álava quería volver a las clases este lunes “con total normalidad” a pesar de tener casi un tercio del alumnado contagiado

El colegio Waldorf Geroa del pequeño pueblo de Trocóniz, a pocos kilómetros de Vitoria pero ya dentro del término municipal de Iruraiz-Gauna, se resistió desde el inicio del curso a hacer obligatorias las mascarillas. Ahora han aparecido al menos 36 positivos, el equivalente a casi un tercio del total de alumnos, y prácticamente la totalidad de los estudiantes y del claustro se hallan confinados por ser contactos estrechos. El pasado viernes fue el último día con actividad presencial pero, apenas unas horas después, la dirección comunicó por correo electrónico a las familias de los escolares que pretendía retomar “con total normalidad” la actividad educativa este lunes con aquellos que dieran negativo en las pruebas PCR, saltándose el protocolo sanitario de guardar cuarentena y superar dos test.

“Os pedimos que comprendáis que los maestros necesitamos abordar este tema desde la calma y la cooperación de todos para, como siempre, velar por los niños, que son lo importante. Por ello, os pedimos que les protejamos de conversaciones que no son adecuadas para ello”, añadían los profesores en el comunicado, en el que incluso subrayaban que había opción de “no realizar la prueba PCR” recomendada por Salud siempre que se guardara una cuarentena de 14 días.

Sin embargo, el domingo a primera hora de la tarde tuvieron que autoenmendarse por orden de las autoridades sanitarias y confirmar que el colegio quedaba cerrado “hasta nuevo aviso”. “Las ganas de volver a la normalidad han hecho que quizá nos precipitáramos en el comunicado que os enviamos el pasado viernes”, arrancan los docentes de Waldorf Geroa en su correo. Un día después, el lunes, Salud ordenó el cierre total del centro durante 10 días. El problema, en cambio, se arrastraba al menos desde la semana anterior, cuando ya cuatro positivos en Primaria y cinco en Secundaria y 50 personas confinadas entre alumnos y docentes. El propio colegio asume que cada caso genera entre 5 y 9 contactos estrechos.

En el arranque del curso, Educación y Salud tuvieron que apercibir a Waldorf Geroa por no hacer obligatoria la mascarilla en sus instalaciones. Según explicó este martes el consejero de Educación, Jokin Bildarratz, hubo un segundo aviso y, finalmente, hace dos semanas, el caso se ha remitido a la Fiscalía. Se trata de un centro privado pero concertado, por lo que recibe fondos públicos.

Explican fuentes internas que el centro no ha sido nada ortodoxo en el cumplimiento de las directrices sanitarias en estos meses, lo que ha motivado quejas de algunas familias. Desde el anonimato, mencionan la existencia de reuniones en las que incluso los docentes no empleaban tapabocas alegando que en la práctica eran una burbuja. En el transporte y en el comedor también se habrían producido contactos, según estas fuentes. Consultada por elDiario.es, la dirección ha optado por no responder a las preguntas de este periódico, aunque sí rechaza de plano la denuncia de que no se hayan utilizado mascarillas.

Este centro es el único cerrado en Euskadi. Sí hay otros 63 con casos activos de coronavirus, lo que mantiene cerradas 93 aulas. Representan el 0,53% del total de la enseñanza no universitaria, tanto pública como concertada. El consejero Bildarratz ha asegurado que éste es un caso único de resistencia a la aplicación de la normativa sanitaria. Se pueden consultar más datos sobre la evolución de la pandemia en Euskadi en el especial interactivo de elDiario.es/Euskadi.