2.096 sanitarios vascos han dado positivo en pruebas PCR y hasta el 8% de la plantilla ha podido pasar el coronavirus
El alcance real de los contagios de COVID-19 entre la plantilla del Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) es una estadística que no se mantiene actualizada y cuyos detalles se van conociendo con cuentagotas. Según los datos recabados por este periódico y actualizados a 4 de mayo, durante la pandemia 2.096 sanitarios han dado positivo en una prueba PCR, un 7% de las 27.798 realizadas desde el primer caso conocido el 28 de febrero y un 5% de la plantilla.
Asimismo, se han realizado 20.427 análisis de anticuerpos y, según el dato aproximado que ofreció el pasado sábado la consejera de Salud, Nekane Murga, el 5% de los asintomáticos que pasaban ese test rápido daba positivo, lo que añadiría otro millar de afectados. Actualmente hay 821 profesionales de baja por la pandemia, según dijo la propia Murga el martes.
De los positivos en PCR -una prueba que mide la carga viral y confirma si se está enfermo en el momento de su realización-, casi 1.300 son vizcaínos, casi 500 alaveses y unos 250 guipuzcoanos, a los que se suman otro centenar de contagios en servicios centrales, emergencias y en el centro de transfusiones sanguíneas. Respecto a los casos de test rápidos -que localizan anticuerpos, es decir, si se ha adquirido en algún momento el virus y el cuerpo ha reaccionado-, sólo es público que si el porcentaje general de sanitarios que han podido pasar la COVID-19 sin haberla detectado es del 5%, en el caso de la OSI Araba -la organización que integra a los centros hospitalarios y ambulatorios de Vitoria y alrededores- la proporción roza el 10%. Asimismo, hay 645 profesionales en cuarentena como posibles casos sospechosos. La mitad de ellos están en centros vizcaínos, unos 140 en Álava y unos 120 en Gipuzkoa.
Sumando todas las pruebas y datos, y teniendo en cuenta que la plantilla de Osakidetza ronda los 35.000 efectivos, entre un 8 y un 9% habría contraído el coronavirus. Algunos de los últimos casos, hasta 100, tienen que ver con el uso de protecciones inadecuadas, como las mascarillas Garry Galaxy entregadas por el Ministerio de Sanidad y que se utilizaron sobre todo en Bizkaia. Existe otro caso con el modelo KN95, si bien no hay datos concretos de si habido incidencias aunque sí se están realizando pruebas masivas a los profesionales que las emplearon.
El Ministerio de Sanidad ha informado este miércoles, por su parte, de que ha enviado a las comunidades autónomas durante la pandemia más de 4,2 millones de test rápidos. En el caso de Euskadi, ha recibido ya 247.300. Según el último informe de Osakidetza, se han utilizado ya 61.416, que han permitido detectar 5.834 positivos en anticuerpos. En cuanto a las PCR, se han realizado 115.593, de las que 13.008 han resultado positivas. A muchos pacientes se les realizan ambas pruebas: si es positivo el test rápido se complementa con una PCR para determinar si la enfermedad es vieja o sigue siendo contagiosa. El Gobierno tiene reservados en el mercado nuevos test rápidos que diferencian IGG e IGM, es decir, que no sólo detectan que se ha pasado la COVID-19 sino si la infección es reciente. No obstante, nunca ha dado datos de la empresa suministradora, de cuántos se pretenden adquirir y de su coste.
0