Ya están aquí

Cada día un paso más hacia la irracionalidad y ya al borde la barbarie, sin que nadie haga nada efectivo para evitarlo. Los fascistas, reforzados, se plantan a cara descubierta entre una maraña de hechos y dichos disuasorios de toda reflexión. Hay que tener muy embotado el cerebro para no oír el pavoroso ruido que llega. Los avances de Trump y su gobierno en la destrucción de la democracia son tan evidentes que no se comprende que el mundo oficial siga mirando para otro lado. Y lo de España, a las puertas de lo que llaman el “nuevo curso”, es una batalla contra el gobierno legítimo llena de golpes bajos.

La ofensiva en este momento se centra en el racismo -con una lucha contra la inmigración utilizada de excusa-, la ruptura de las normas democráticas vigentes, y el amedrentamiento de periodistas y de opositores políticos; todo ello con la complicidad de medios al servicio de la involución. Y esto va a tal velocidad que lleva camino de ser inútil ya quejarse del aumento en el gasto de armamento o del problema de la vivienda con el permanente timo de quienes la usan para la especulación.

“La democracia muere en la oscuridad” era el lema del Washington Post hasta que su nuevo dueño Jeff Bezos (Amazón) inscrito en el séquito Silicon Valley de Trump lo suprimió. Hoy publica esto.

Al servicio de Trump también, Tony Blair, el ex presidente británico que se inventó la “tercera vía” de la socialdemocracia, se ha reunido con el magnate que preside Estados Unidos en la Casa Blanca. Blair le asesora y ya le había presentado un informe cuyo contenido no trascendió. Se sabe que quiere un futuro para Gaza “que no esté gobernado ni por Hamás ni por Israel” y coincide con Trump en la oportunidad única que tiene la zona para el desarrollo comercial.

Este par de apuntes llegaban mientras me disponía a escribir este artículo. ¿Y por dónde sigo, visto el panorama?

Empecemos por nuestro país. Espeluznante el Partido Popular intentando tapar su desastrosa gestión en los incendios: Un nivel de desidia atroz, lleno de imprevisiones, y, llegado el fuego y los destrozos, de osadas y descomunales mentiras. Con vidas y haciendas de por medio. Les da igual. La comparecencia de la ministra de Defensa Margarita Robles, en “su” Senado, a “su” petición, fue demoledora en datos, y aún se permite una de las portavocías del PP, Ester Muñoz, de calificarla de “hueca”. Estaría mirando su propia cabeza en el espejo al buscar el calificativo.

Les salió bien en la Dana y repiten. Ahí tienen a Mazón, todavía en la Presidencia de la Generalitat valenciana, comiendo a todo lujo al nivel de gastarse 22.000 euros en seis meses con un par de colegas y dando contratos de reconstrucción a los amigos. Y no pasa nada. Y sin que se haya contado dónde estuvo realmente, con quién y para qué, el día que se desencadenó la DANA mientras se ahogaban sus conciudadanos.

Todo esto ya lo sabemos hace tiempo, los desequilibrios de trato en la prensa también, pero lo que ha subido brutalmente de tono es la agresividad del PP para llenar de tinta de calamar a las audiencias, con la complicidad de quienes la difunden. Publican sin empacho series sobre “la España que no funciona” (El Mundo), cuando funciona más que en épocas precedentes, o nos cuentan la milonga del desprestigio internacional de Sánchez por el que tanto han trabajado sin éxito. ¿Bajo mano también? porque es sospechoso este titular de portada del Financial Times sobre el juicio a Begoña Gómez obviando el escándalo que representa el juez Peinado y su instrucción del caso.

Salen como en una jauría de perros hambrientos Cuca Gamarra, Dolors Monserrat o los Bendodos y Tellados a hablar de la corrupción que dicen ellos tiene “acorralado a Sánchez” el mismo día que El País recuerda que llegan en noviembre los juicios finales de la Gürtel del PP en donde ya hay un centenar de condenados por corrupción y tres sentencias a los populares como partido por lucrarse de ella. ¿Qué organización de cualquier tipo podría permitirse con ese historial tener voz en los medios que quieran para soltar veneno contra Sánchez sin que nadie precise el contexto de lo que dicen, ni cuente lo que hacen? Condenas sobre masiva corrupción cierta del PP, frente a casos nada edificantes del PSOE sin duda, pero sobre todo un lawfare claro para enfangarlo todo.

Este es el día a día. El fondo que aterra y va creciendo es que entretanto los fascistas titulares actúan. Que un presidente de un partido político con escaño pida “hundir el barco de negreros de Open Arms atracado en Tenerife”, como ha hecho Abascal, y no tenga consecuencias es autorizar al sujeto a mucho más. ¿Han oído alguna crítica del PP al respecto? Precisamente andan rechazando acoger a jóvenes migrantes en la cruzada xenófoba que se está extendiendo.

No es que necesiten aliento los fascistas, ya actúan. Un dirigente de Vox, identificado como Pedro Bayonas con su novia Sheila Muñoz -y ya detenidos según se ha comunicado- y un tercer sujeto se permitieron acosar y agredir al periodista Román Cuesta de Canal Red de noche en la puerta de su casa. No hace mucho también fue objeto de agresión fascista Antonio Maestre, colaborador de Eldiario.es. Esto hay que pararlo en seco. Y, en la línea del amedrentamiento preventivo, Abascal en persona amenazó a Jesús Cintora y su programa en TVE. “Si gobernamos no habrá Malas Lenguas”, le dijo. Y, en otro momento, aludiendo a Javier Ruíz dijo que “se le iba a helar la sonrisa”. El resuello se hiela al ver que se opera así sin que tenga consecuencias.

Pero es que el PP marca pautas. Es sonrojante que se haya atrevido a pedir que RTVE expulse a la periodista Sara Santaolalla “por insultar a millones de españoles” (votantes del Partido Popular a los que llamó idiotas). Es como ir cerrando el círculo de quién es y a qué se dedica este partido. A gestionar para los ciudadanos no, y dadas las consecuencias de cuando no lo hace o lo hace rematadamente mal, resulta aterrador que ostenten algún poder. Pero quieren más, quieren La Moncloa, y lo buscan con la bronca y la censura de la información. Es casi pueril pedir que echen a una periodista por una opinión cuando tienen a sus piezas mayores insultando con los más gruesos improperios al Gobierno y sus miembros. Y el colmo, absoluto, que el asistente de Viri, la mujer de Rajoy mientras fue presidente, que hizo un carrerón después de llevarle las bolsas de la compra, se haya permitido aludir a Santaolalla en el grupo de “mujeres prostituidas”, dice, enchufadas por el gobierno de Sánchez.

El ruido. El fondo es si cabe peor. Tremendo lo que perpetraron este jueves ABC y Feijóo sin que haya tenido trascendencia, alineados con lo peor que se está cociendo en la esfera internacional en donde la ruptura de las normas democráticas es ya un objetivo claro. Para Trump desde luego. ABC lanza en titular de portada: “EEUU excluye a España de la alianza militar contra el narcotráfico de Venezuela”. En realidad, Trump busca el petróleo de Venezuela y parece que quiere conquistarlo a la brava, sin respetar ninguna norma del Derecho internacional. ¿Qué es eso de asaltar un país con el argumento que sea? La excusa no cuela de cualquier modo en quien apoya a dictadores varios, y sobre todo apoya el genocidio que perpetra Netanyahu. Pero nuestro Alberto Núñez Feijóo se apunta ya a la banda.

De momento ni siquiera hay tal “alianza militar”. En la propia portada, una línea más abajo, admiten la falsedad del titular: dice que involucra. En páginas interiores -hasta donde admite leer sin pagar manipulaciones- se concreta en que busca involucrar que no es lo mismo. Pero Feijóo ni en leer se molesta.

El momento es preocupante a muchos niveles y así lo hacen notar figuras internacionales tan destacadas como la abogada italiana Francesca Albanese, relatora especial de las Naciones Unidas para los Territorios Palestinos. Ante la represión en Alemania de las protestas contra lo que está perpetrando Israel ha dicho hoy mismo: “Como italiana, como europea, les recuerdo a mis amigos alemanes: ustedes produjeron el nazismo, como nosotros, italianos y españoles, produjimos el fascismo. Ya una vez destruyó Europa. Eres responsable de lo que ocurre en tu país. Chequea a tu policía. La situación se está descontrolando”.

Ya están aquí y ni siquiera disimulan. Hay que tener muy claro a qué lado se sitúa cada uno. Frente al fascismo, la irracionalidad, las trampas, sigue habiendo miles de personas a quienes importa la democracia, la justicia, la solidaridad, se revuelven con las mentiras, e incluso intentan hacer algo para detener esta terrible deriva. Entre las prioridades, parar la catástrofe humanitaria que ha producido el Israel de Netanyahu en su despiadado genocidio del pueblo palestino. Este domingo, 31 de agosto, saldrá la Global Sumud flotilla para intentar de nuevo romper el bloqueo a Gaza. Partirá de Barcelona con más de 50 barcos de 44 países. De resultado incierto frente a la canalla que se enfrenta, se impone intentarlo una y otra vez. ¿Recuerdan aquella frase de Luther King de la positividad ante los retos difíciles, casi imposibles? “Si supiera que el mundo se acaba mañana, yo, hoy todavía, plantaría un árbol”. Tampoco está de más mandar a la trena a quienes cercenan derechos, al menos quitarles sin contemplaciones la motosierra.