Siempre nos preguntaremos las personas completas si una criatura incapacitada de cuerpo puede ser tenida en cuenta para dar ideas del mundo. Quien no sabe de las pasiones de las personas (el amor carnal, el odio, el esfuerzo físico, el sudor y el cansancio, o el placer de nadar o tomar el sol, la locura de la pelea, golpe a golpe, el correr de las lágrimas de alegría cuando se besa por primera vez a un hijo,…), quien nunca pudo participar de lo que participamos los normales, ¿Puede mandar en un partido político?
Xavier Alcalá, nacido en Ciudad Real y escritor en lengua gallega, nos “regalaba” hace unos días este párrafo digno de enmarcar. Cuando lo leí no podía creérmelo. Hay tanto de lo que hablar que se podría escribir una tesis. Para empezar el término persona completa*: ¿Qué quiere decir?¿Acaso las personas con discapacidad no somos completas?¿Hay algún estándar? ¿Qué organismo lo recoge?. Habla también de las pasiones de las personas; el amor carnal, el odio, el sudor o el cansancio… ¿Acaso son propiedad de las personas “normales”?¿No es posible poder disfrutar del sol, de la playa, del amor, si no eres una personal “normal”? Sigue diciendo que si no puedes compartir lo que “los normales” es dudoso que se pueda gestionar la cosa pública si no eres una persona normal.
Después de releer e intentar analizar lo que dice este señor no quepo en mí del asombro. No entiendo qué lleva a una persona a hablar con esa superioridad moral y clasismo de lo que él considera como engendros, digo yo, porque visto los términos que utiliza no me extrañaría.
Me surgen muchas preguntas. ¿Qué se necesita para gobernar? ¿Vivir a tutiplén?¿Tener muchas experiencias?¿o más bien saber gestionar los recursos disponibles para una población determinada con características particulares? ¿Es necesario, acaso correr, haber ido a muchas piscinas o tomado mucho el sol para poder ser una persona cabal y poder intentar mejorar la vida de los ciudadanos? Mi indignación crece por momentos. ¿Qué clase de sociedad hemos construido para que haya gente que piense que una persona con una discapacidad no puede representar a los ciudadanos?
La superioridad moral y clasista de ciertos personajes de este país es digna de estudio. No sé en qué momento alguien se creyó mejor que otro por el hecho de tener su cuerpo “completo”, y no entiendo cómo es que se invalidan las tesis de alguien porque éste piensa que no ha tenido una vida plena. ¿Qué es una vida plena? ¿Tienen todos los políticos que vivir experiencias parecidas en el terreno físico o puede haber distancia?
La única condición que se le debería poner a un político es que fuera honesto y que cumpliera lo que promete, me da igual si ha tenido una vida plena de experiencias o ha estado recluido en un monasterio cartujano, pero que gestione bien. Estoy harto del clasismo, de que nos hagan personas de segunda y que haya una primera división de personas completas y normales.
Desde aquí le digo Xavier Alcalá, no le digo señor porque eso le queda grande, que hay mucha gente válida que, a pesar de tener una discapacidad, se parte los cuernos por hacer de este un país mejor.