Cs facilita en Calp la reprobación de la alcaldesa del PP por llamar a Pedro Sánchez “profanador, sacrílego y ateo” tras la exhumación de Franco
La alcaldesa de Calp, la popular Ana Sala, ha perdido una votación más que delicada. Ha sido reprobada por su propio pleno en la sesión celebrada durante la tarde de este lunes por una publicación del pasado 24 de octubre cuando, a raíz de la exhumación de Franco, llamó al presidente del Gobierno en funciones, el socialista Pedro Sánchez, “profanador de tumbas”, “sacrílego” y “ateo” en una red social.
La propuesta de reprobación había sido presentada por Defendamos Calpe y ha contado con el apoyo de los otros dos grupos de la oposición, PSPV y Compromís. Hasta aquí, lo lógico. Pero para que fuera aprobada ha sido imprescindible la abstención de los dos ediles de Ciudadanos, socios de gobierno del PP, que en esta ocasión han eludido apoyar de forma explicita a su alcaldesa.
En realidad, el partido del naranja Juan Manuel del Pino, que es primer teniente de alcalde, se ha desentendido de la cuestión: ha dicho que es necesario separar las declaraciones de los políticos en las redes sociales de sus cargos institucionales en el ayuntamiento.
La versión de Sala
Por su parte, Sala no se refirió al meollo de sus controvertidas declaraciones, pero dijo que “estamos acostumbrados a que la izquierda criminalice y no pase absolutamente nada, pero yo no voy a consentir que a nadie del PP ni del equipo de gobierno se le criminalice o se le insulte a través de los medios de comunicación”. La alcaldesa reprochó al proponente de la moción “su animadversión hacia mí, como antes la tenía contra César Sánchez”, el anterior alcalde del PP.
Disculpas a los vecinos
Si Sala hace ahora caso de lo que se ha aprobado en el pleno, deberá asimismo disculparse “de forma clara ante los vecinos y vecinas de Calp” porque eso es lo que también pedía la moción de Defendamos Calpe. En la misma, este grupo calificaba de “lamentable” el escrito de la alcaldesa, “primero, por el simple hecho de señalar como profanador a un ciudadano, y que además es presidente del Gobierno, cuando la decisión está avalada por el Congreso de los Diputados y ratificada por el Tribunal Supremo”.