El dueño de un bar de Torrevieja y un cliente, sancionados por incumplir el estado de alarma

La Guardia Civil ha propuesto para sanción al propietario de un bar de Torrevieja por mantener el negocio abierto durante el estado de alarma y al cliente que en el momento de la operación entró en el local.

Los hechos ocurrieron el pasado 2 de abril cuando la Benemérita de la localidad de la Vega Baja tuvo conocimiento, a través de avisos de vecinos de la zona, de que un bar de dicha localidad seguía manteniendo su actividad hostelera, de manera clandestina, dejando pasar a clientes y con la persiana medio bajada.

Los agentes verificaron los hechos denunciados, observando cómo un hombre de avanzada edad, que paseaba un perro, se posicionó frente a la puerta del bar y, tras comprobar que no hay ningún tipo de agente de la autoridad en las inmediaciones, dio con su pie dos golpes a la puerta. Desde el interior del local, una persona le abrió la puerta, accediendo rápidamente el cliente al interior, bajando de nuevo la persiana.

Tras esto, agentes uniformados accedieron también al local, donde se comprobó que, efectivamente, el cliente estaba consumiendo, incluso con la botella encima de la barra del bar y que la cafetera se encontraba encendida.

Como consecuencia de ello, tanto el propietario del bar como el supuesto cliente del mismo han sido propuestos para sanción, por no respetar las restricciones de movilidad dictadas en el R.D 463/2020, del estado de alarma.