Compromís critica que se adjudique otro contrato a la consultora en la que trabajó un concejal del PP: “La estética es fundamental”

El servicio de contratación del Ayuntamiento de València ha propuesto la adjudicación de un nuevo contrato a KPMG financiado con fondos europeos. En concreto, se trata de un servicio de asesoramiento para el impulso de la transformación digital actividad comercial de pymes y autónomos en zonas turísticas del término municipal València, cuyo precio de licitación sin impuestos es de un millón de euros (1,3 millones con impuestos), según publica la plataforma de contratación del Estado.

De confirmarse la adjudicación definitivamente, sería el segundo contrato que gana la consultora tras hacerse el pasado 29 de enero con otro por un importe de 129.701,32 euros (IVA incluido) para la gestión del servicio de oficina técnica para el desarrollo del proyecto Capitalidad Verde Valencia 2024.

Se da la circunstancia de que esta es la consultara a la que estuvo varios meses vinculado profesionalmente el concejal de Grandes Proyectos del PP, José Marí Olano, quien desde su nombramiento tuvo una dedicación a las labores municipales de solo el 25%, por lo que su sueldo como concejal era de 1.650 euros. De esta forma, hasta que anunció su desvinculación el pasado mes de noviembre, dedicaba un 75% de su labor profesional a KPMG, de la que era socio y apoderado en la Comunitat Valenciana.

Posteriormente, desde el 1 de diciembre de 2023 su dedicación parcial al Ayuntamiento pasó del 25% al 75% y su sueldo municipal se elevó a casi 70.000 euros. El otro 25% lo dedica a otras labores profesionales desligadas de la consultora. Al respecto, la alcaldesa de València, María José Catalá, justificó que Olano mantuviera desde junio hasta diciembre su posición como edil vinculado a la consultora en la necesidad de disponer de un “tiempo de transición” para abandonar sus responsabilidades profesionales con la compañía.

En cuanto a la propuesta de adjudicación, el Ayuntamiento estima la oferta de KPMG como la mejor con arreglo al precio ofertado, con una baja del 56%, y a la experiencia acreditada, dos de los aspectos más valorados. El servicio de contratación requirió a la consultora un informe en el que justificara semejante rebaja del precio de licitación, una explicación que convenció a los técnicos, que finalmente avalaron la propuesta de adjudicación.

En su respuesta, KPMG argumenta que “con la oferta económica presentada garantiza el cumplimiento de los costes laborales, las condiciones sociales del equipo de trabajo y el convenio colectivo estatal de empresas de consultaría y estudios de mercado y de la opinión pública que es de aplicación”. Entre otras cosas, afirma que “dispone de medios técnicos clave para aportar eficiencia y eficacia en la prestación de los servicios, permitiendo ahorro de recursos y tiempo en la ejecución del servicio”. En este sentido indica que “dispone de oficina en València, por lo que no necesita invertir en elementos logísticos ni tecnológicos”.

También alega “un profundo conocimiento del equipo de trabajo de las necesidades de las pymes y personas emprendedoras que permiten una menor imputación de precio y ahorro en tiempo y esfuerzo, habiendo desarrollado proyectos similares y contando con experiencia para ello”.

Por todo lo expuesto, el servicio de contratación considera que se realiza “una justificación satisfactoria de la reducción de costes en base al cumplimiento del Convenio colectivo estatal de empresas de consultoría y estudios de mercado y de opinión pública, las propias características de la empresa y su experiencia profesional en este campo, por lo que se aprecia que la proposición puede ser cumplida y puede ser admitida en razón a la justificación presentada”.

Críticas de Compromís

El concejal de Compromís, Ferran Puchades, ha afirmado que “nuevamente el Ayuntamiento de València ha adjudicado un contrato a la consultora KPMG, la empresa para la que trabajaba el concejal de Grandes Proyectos, José Marí Olano, hasta el pasado mes de noviembre; el anterior lo fue por 130.000 euros pero el que ahora se anunciará, multiplica aquella cantidad”.

Según Puchades, “durante la campaña electoral, la candidata Catalá anunció la incorporación de Marí Olano como un gran fichaje procedente de la abogacía del Estado y con experiencia en la gestión pública, pero la realidad es que ya en aquel momento, no solo trabajaba sino que también era socio, de la consultora KPMG, por lo cual ejercía como concejal con una disponibilidad de solo el 25%”.

“Desde Compromís València no negamos que, el hecho de que el Ayuntamiento adjudicó contratos a la empresa de la que era socio el concejal Marí Olano, sea legal, pero la estética y las formas son fundamentales en política para garantizar que los intereses de toda la ciudadanía son gestionados adecuadamente por los responsables políticos. Los hechos podrían conducirnos a la sensación de que el paso por la política de algunas personas favorece los intereses particulares de determinadas empresas. Que pueda haber dudas y sombras sobre la gestión del dinero público contribuye al desprestigio de las instituciones y el alejamiento de la ciudadanía de la política”, ha comentado.