Ximo Puig pide a Montoro que “no pida imposibles” en la reducción del déficit
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha solicitado al ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, “que no pida imposibles”, en referencia a la reducción del déficit autonómico. El jefe del Consell ha insistido en que el ministro “sabe perfectamente que la Comunitat Valenciana está infrafinanciada, que tiene dificultades porque ha habido una mala gestión”, lo que ha generado una situación a la que “hay que dar respuesta”.
Así se ha expresado durante su visita a la XVI Fira del Comerç de Riba-Roja, donde ha insistido en que el Gobierno de la Generalitat no realizará nuevos ajustes. “No estamos dispuestos a recortar más, porque recortar en sanidad, educación o servicios sociales sería inasumible para los valencianos”, ha indicado Puig.
En este sentido, ha defendido que “los problemas de España ante el déficit no son de las comunidades autónomas, sino, en gran parte, del Estado”. No obstante, ha dicho, desde el Consell continuarán “defendiendo el interés de los valencianos”, pero lo harán, ha puntualizado, “desde el diálogo”.
Por ello, Puig ha deseado que el Gobierno central que salga de las urnas el próximo mes de junio sea “cómplice” de la Generalitat Valenciana y “comprensible” con sus ciudadanos; y no “un gobierno no que nos margine en la financiación, en inversiones y que no asuma la deuda histórica”. “Necesitamos un gobierno que ayude a los valencianos”, ha concluido.
Cruce de informaciones
Las declaraciones del president se producen después de unos intensos días de negociaciones entre el Consell y el departamento de Montoro. Así, el pasado jueves se producía una nueva y “muy tensa” reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera en la que se aprobaban los objetivos de estabilidad financiera de las comunidades autónomas con el rechazo de la Comunitat Valenciana, Catalunya y Baleares.
Sin embargo, el viernes, la vicepresidenta Mónica Oltra anunciaba un acuerdo con el ministerio, que aceptaría un recorte máximo de 170 millones de euros a costa de aplazar el pago a los grandes proveedores del último trimestre del año a cambio de la recepción del segundo plazo del FLA, que debía producirse en mayo.
Apenas unas horas después, el ejecutivo en funciones de Mariano Rajoy advertía que pagarán directamente las facturas pendientes a los proveedores, de forma que éstos se aseguran el cobro “si el gobierno valenciano no cumple”, y que posteriormente estos importes se retendrán a la Generalitat de los fondos autonómicos.