Zupiria alerta de la gravedad de los sucesos de Azpeitia: “Robaron 'talkies' y esposas y hubo agresiones”
“Un grupo de jóvenes se presentó en el Ayuntamiento de Azpeitia a pedir explicaciones a la Policía municipal porque habían acompañado a la Ertzaintza en el momento de la identificación. Tres personas entraron en las oficinas de la Policía municipal, se enfrentaron a los policías y abrieron la puerta. Y más de cuarenta personas entraron al interior de las oficinas. [Los agentes] Pidieron apoyo y ayuda a la Ertzaintza. Y la primera presencia de la Ertzaintza fueron tres patrullas que estaban en los alrededores, que acudieron a apoyarles. Son ertzainas que hicieron lo que pudieron y que terminaron en el suelo. Hubo robos de 'talkies'. Hubo robos de esposas. Hubo agresiones. Y hay dos ertzainas heridos”.
El consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, ha descrito en Radio Euskadi los momentos posteriores a cuando, en la madrugada del sábado al domingo, en Azpeitia, una patrulla de la Ertzaintza identificó a una persona por hacer una pintada de ACAB ('all cops are bastards', en inglés), que según el consejero llama “hijos de puta” a todos los agentes. Después, jóvenes del Gaztetxe fueron a dependencias municipales a pedir explicaciones. Sindicatos policiales han alzado la voz contra lo que califican de “asalto” y el propio lehendakari, Imanol Pradales, ha pedido no trivializar la violencia. De otro lado, la alcaldesa de EH Bildu, Nagore Alkorta, ha considerado “desproporcionada” la participación de la Ertzaintza y el dirigente abertzale Arkaitz Rodríguez ha lamentado que se le dé más importancia a una pintada de pequeño tamaño en un contenedor de pilas que a los casos de tortura policial.
“A veces parece que las cosas comienzan cuando aparece la Ertzaintza. Y, no, la Ertzaintza hace su trabajo. Y espero que siempre lo haga bien. No creo que los incidentes que se produjeron en Azpeitia comiencen cuando llega la Ertzaintza. Una patrulla presenció cómo una persona pintaba en un contenedor que todos las policías son hijos de puta. Y a eso la Ertzaintza respondió con una sanción, que creo que es lo que debe”, ha insistido Zupiria. Ha agregado que no parece coherente criticar que en una mezquita de Vitoria aparezcan pegatinas con insultos para la comunidad musulmana y dejar pasar el ACAB. “Esas dos acciones son iguales y exigen la misma contundencia [...]. Respeto a las instituciones, respeto a las personas y respeto al diferente. Porque sabemos dónde empiezan estas cosas pero no dónde acaban”, ha agregado.
“Constato que hay un nulo apoyo por parte de la alcaldesa de Azpeitia a la presencia y la actuación de la Ertzaintza. He llegado a pensar que la Ertzaintza es una Policía no querida en Azpeitia y que sus ciudadanos no quieren ver a nuestros ertzainas de uniforme en la calle haciendo su trabajo. Si esto es así, me preocupa muchísimo. Los ertzainas son la Policía democrática de este país. Están para lo que están. Están para garantizar la seguridad, están para garantizar la convivencia y tienen que hacer su trabajo. Me cuesta entender que una representante institucional ponga en cuestión el carácter institucional de la Ertzaintza y sus funciones. Espero que los incidentes que se produjeron el otro día, que creo que son muy graves, no se reproduzcan a lo largo del verano”, ha añadido Zupiria.
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