Las personas, y punto, son las que hacen las cosas, ni su sexo, ni su raza, ni su identidad sexual, porque hay mujeres machistas, gente racistas con su propia raza, homófobos del colectivo LGTB, así como clase trabajadora que reniega de su condición y vota puerilmente al partido del “señorito”, como antídoto para dejar de serlo ¡qué ridículo!... y estas 4 extravagantes paradojas , están dentro de los colectivos más acomplejados y serviles, que se congregan en la derecha extrema y la ultraderecha de la sociedad.