El vicepresidente de la Generalitat acusa a Pedro Sánchez de negar el diálogo por razones electoralistas
El vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, cree que la cercanía de las elecciones generales es el principal escollo para el diálogo con Catalunya. El número dos del Govern asegura que Sánchez no habla con Torra por “miedo a un desgaste” de cara al 10N. Su reflexión se refiere a los contactos que el jefe del ejecutivo catalán intentó estos días con el presidente del Gobierno, obteniendo negativas por parte de Moncloa.
El dirigente de ERC ha protagonizado en Madrid un desayuno informativo organizado por Europa Press en el que ha planteado la necesidad de poner en marcha una mesa de diálogo para buscar soluciones al conflicto catalán. Lo ha hecho durante un acto sin ministros y al que el Gobierno ha enviado a algunos directores generales.
Aragonès ha criticado que Pedro Sánchez haya excluido a los partidos soberanistas de la ronda de conversaciones planteada para abordar las consecuencias de la sentencia del procés. El dirigente de Esquerra Republicana de Catalunya pide una mesa de diálogo en la que se puedan hacer propuestas con libertad y sin vetos.
Aragonès asegura que “el autonomismo ha muerto” y advierte de que el camino hacia la independencia “es irreversible para millones de catalanes” por lo que pide la comprensión del Estado y una solución “solvente, articulada y leal”.
En su discurso, ha insistido en numerosas ocasiones en la necesidad de diálogo y ha advertido de que “el bloqueo no es bueno” porque “el conflicto corre el riesgo de enquistarse”. Según Aragonès, el problema catalán “no es un problema de orden público ni de convivencia entre catalanes, sino entre Cataluña y las instituciones del Estado”.