EH Bildu denuncia que los huertos ecológicos pierden más de la mitad de su presupuesto
El grupo municipal de Bildu Gasteiz ha denunciado los continuos recortes que sufre la actividad de huertos ecológicos, dependiente del Centro de Estudios Ambientales, CEA y que han provocado la supresión de “muchos de los servicios que ofrecía”. Mientras la partida presupuestaria del ejercicio 2012 era de 117.519 euros, el presupuesto diseñado por el PP y su socio presupuestario, el PNV, destina a los huertos 49.404 euros, un 58% menos de recursos que el año anterior. Esta reducción ha provocado el despido el pasado mes de julio de dos trabajadores del área.
Los cursos de jardinería ecológica se han suprimido, también la Campaña de Planta Autóctona así como los talleres relacionados con la naturaleza y una vida masecológica. “A pesar de la larga lista de espera que existe así como de las huertas vacías que hay, los cursos que permitían el acceso a los huertos a los cuidadanos se han recudido a la mitad por lo que habrá menos personas que puedan acceder a ellos. También se han rebajado las horas de tutorías, en las que las personas usuarias pueden solventar dudas ante problemas que van surgiendo”, explica el portavoz de Bildu, Kike Fernández de Pinedo. “Los únicos criterios que importan son los que dictan desde Hacienda, y al PP y a su socio presupuestario no les importa si así se ponen en peligro políticas medioambientales asentadas o si se siguen alargando las listas del paro en Araba, el único territorio donde en julio no ha bajado”, sostiene Fernández de Pinedo.
El grupo municipal asegura que estos recortes han suscitado las quejas de muchos usuarios que ya han entregado en el CEA unas 200 firmas de denuncia.
Según declara Kike Fernandez de Pinedo no se trata de un recorte aislado. El nuevo pliego de condiciones del centro de Interpretación de los Humedales de Salburua, Ataria, además de incorporar recortes en los horarios, conlleva la contratación de una empresa foránea “con una propuesta que pone en peligro las políticas desarrolladas y que precariza de forma drástica las condiciones laborales. Al mismo tiempo estos cambios afectan a la calidad con la que se atiende a las personas que acuden al Ataria así como la labor medioambiental que se desarrollaba”.