Obama, en España: “Tardé 6 meses en ver que los hombres de la Casa Blanca hablaban más que las mujeres, aunque supieran menos”
El ex presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha sido la gran estrella invitada en la apertura de la XIX cumbre mundial del turismo (World Travel and Turism Council), que ha reunido este miércoles en Sevilla a muchas de las grandes multinacionales del sector. La expectación por la conferencia de Obama, ante unas dos mil personas embelesadas, era enorme. Quien fue el 44º presidente de los Estados Unidos ha utilizado los viajes como eje principal de su discurso, vinculando el turismo y las experiencias en otros países con la política, la tolerancia y los valores democráticos. “En política nunca consigues el 100% de lo que quieres, como en el matrimonio, pero la razón por la que nos metemos en política, y porque nos casamos, es porque queremos comprometernos. El compromiso es eso. Aunque ahora el compromiso se ve como una estafa”.
Obama aterrizó en un avión privado el martes a medianoche en el aeropuerto de San Pablo, en Sevilla, y se alojó en el hotel Alfonso XIII, en el centro de la ciudad. Antes de impartir su conferencia -en formato de charla abierta con el presidente de la cumbre del turismo- Obama ha recibido de forma protocolaria y sujeta fuertes restricciones el saludo de 63 personas, autoridades y consejeros delegados de las empresas participantes (sólo ocho de la lista privada del presidente). El ex presidente ha admitido que Estados Unidos ha permanecido muchos años “aislado” de los problemas del mundo exterior, “más allá del océano que nos separa del resto”. “No siempre nos hemos involucrado en los problemas de otros, de aquí en Europa, por ejemplo. Y eso a veces nos ha dado una imagen de arrogantes”, ha dicho.
No ha sido el único momento de autocrítica que ha hecho el ex presidente de Estados Unidos, y la visión que el mundo tiene de la mayor potencia política. “En mi administración implementé una perspectiva de que lo que ha hecho que los Estados Unidos sea un país tan excepcional no sucede cuando presionamos a nivel internacional y nos ponemos por encima de otros, sino cuando reconocemos nuestro lugar en el mundo y cumplimos con las reglas internacionales que respetan a todos los países. Puede que esto yo lo aprendiera de joven, viajando por el mundo”, dice.
Obama se ha mostrado especialmente preocupado por los populismos, los que están detrás de la crisis económica, del Brexit, de algunos movimientos políticos en Europa, y también los ataques a la mujer. “El populismo que rechaza a las minorías tiene mucho en común con el que aparta a las mujeres. Hay un solapamiento interesante entre los populismos dirigidos contra las minorías, pero también contra las mujeres. Aquellos que quieren preservar una sociedad patriarcal y una relación desigual de género. Ambos tipos de populismo tienen que ver con defender el status quo, y en las sociedades avanzadas quienes ocupan ese status quo, quienes se ven amenazados son los hombres”, asegura. El líder norteamericano ha admitido que encontró esos mismos problemas en su Administración. “Si haces tu trabajo empleando a mujeres en espacios de poder, lograrás que las hijas de esas personas tengan algún día las mismas posibilidades que ellas”.
En la actualidad, el 50% del equipo de Obama está compuesto por mujeres. “En la Casa Blanca también nos enfrentamos a este problema, no somos perfectos. En la Casa Blanca tenía a muchas mujeres en posiciones de poder, pero me llevó seis meses darme cuenta de que en nuestras reuniones con mi gabinete (secretarios, aquí ministros). Los hombres hablaban todo el rato, monopolizaban la conversación, aunque no supieran nada del asunto del que hablábamos. Y tuve que hablar con los hombres para pedirles que no hablaran a la vez que otros y hablé con las mujeres para decirles que dieran un paso al frente”, ha recordado.