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La normativa sobre la pólvora trae la polémica a las fiestas de Moros y Cristianos de Albacete

Un arcabuz en el momento del disparo.

Diana Calzado

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Los Episodios Caudetanos, las Guerrillas entre Moros y Cristianos de Caudete o la emblemática Embajada Mora de Almansa se encuentran en un momento de incertidumbre. Diversas asociaciones festeras han recogido en un documento sus preocupaciones por el cambio de normativa del uso de la pólvora negra que se produjo en 2017 y que ha supuesto un aumento de su precio y restricciones en su almacenamiento, factores que en opinión de estos colectivos pueden acabar con estas celebraciones que cuentan con siglos de antigüedad.

La pólvora negra tiene como principal característica el humo que se produce tras su explosión. El sonido, el olor y la imagen que deja durante el disparo de los arcabuces, son señas de identidad de las fiestas de Moros y Cristianos.

Durante los meses de primavera y verano, varios municipios españoles celebran estas festividades en las se recrean momentos históricos de la época de La Reconquista . Dentro de la geografía nacional, estas localidades pertenecen sobre todo al denominado Arco Mediterráneo como es el caso de Valencia, Alicante y Murcia, así como Albacete y Cuenca.

En la provincia albaceteña las más importantes son las de Caudete, que cuentan con 400 años de antigüedad y se celebran del 6 al 10 de septiembre, y las Fiestas Mayores de Almansa, del 30 de abril al 6 de mayo, que han sido declaradas de Interés Turístico Internacional.

Este año, la antesala de estas celebraciones están siendo especialmente polémica debido a las restricciones y subidas de precio del uso de la pólvora negra como elemento festivo. Este tipo de pólvora, que es la única autorizada por el Gobierno central para actividades lúdicas, se usa en actos de arcabucería programados, es decir, con armas de fuego similares al fusil, con mecha para prender pólvora y que son las utilizadas en este tipo de actos.

En este sentido, diversos colectivos de los municipios que abarcan la celebración de estas fiestas, como la Asociación de Comparsas de Caudete, la Asociación de Comparsas de Almansa y la Asociación de Mayordomos de Yecla, han mantenido reuniones con las diferentes Administraciones y partidos políticos para exponer las dificultades que están atravesando para poder mantener esta tradición en el uso de arcabuces.

En el mismo orden, Isabel Úbeda, presidenta de la Asociación de Comparsas de Caudete defiende que más del setenta y cinco por ciento de los actos celebrados durante sus fiestas dependen de la pólvora y sin esta “perdemos nuestras fiestas, nuestro patrimonio y nuestra historia”. Aun así, afirma que “se ha sentido escuchada por las Administraciones y nos han trasladado que nos va a ayudar”

Las fiestas de Moros y Cristianos de Caudete comprenden La Entrada y La Enhorabuena, las Guerrillas o simulaciones de lucha entre los bandos moros y cristianos, donde la pólvora y los disparos de arcabucería son los protagonistas y las armas utilizadas están fabricadas por artesanos caudetanos. Además, las procesiones de la Virgen también están acompañadas con salvas de arcabucería.

En el caso de Almansa, el concejal delegado de Fiestas y Recreación Histórica y el presidente de la Agrupación de Comparsas, David González, han denunciado la situación en que se encuentran las fiestas de distintas poblaciones debido al desmesurado aumento del precio de la pólvora.

Durante una rueda de prensa manifestaron su descontento por el desorbitado precio de la pólvora para las armas de avancarga ya que “dicha subida pone en peligro la celebración de cualquier acto de arcabucería ante el riesgo de la pérdida de participantes debido a los nuevos costes que supone para estas personas”. En esta localidad se verían afectadas las Fiestas de Moros y Cristianos y la Recreación de la Batalla de Almansa.

Según estas asociaciones todo empezó en 2017 cuando se produjo un cambio en la normativa con la Instrucción Técnica Complementaria 26 referente a manifestaciones festivas con uso de armas de avancarga. Este tipo de armas reciben su nombre porque son cargadas por la boca del cañón o por la boca de la recámara del tambor. La carga de proyección es pólvora negra, por lo tanto, se consideran armas de avancarga el arcabuz, el trabuco, el mosquete, así como los primeros cañones o fusiles.

Esta modificación, cuya intención fue dotar de la necesaria seguridad legal y administrativa al empleo de la pólvora en los actos festivos, “ha generado el efecto contrario” según los colectivos demandantes.

Entre los problemas que exponen los festeros se encuentran los plazos asignados para el reparto y almacenaje de la pólvora, reflejados en la nueva regulación, con la imposibilidad de almacenar más allá de 72 horas para festejos de menos de 500 participantes activos y de 96 horas para más de 500, y que obliga a realizar diferentes repartos de pólvora. Además, de la subida del 300 por ciento del precio de la pólvora, y que en el caso concreto del mes de agosto ha sido de 32 a 48,5 euros.

Desde este diario hemos intentado hablar con alguno de los pocos artesanos que quedan en la fabricación de estas armas, pero consideran que es un problema entre las asociaciones festeras y las administraciones y prefieren no inmiscuirse.

Demandas trasladadas al Ministerio

Los trámites y autorizaciones necesarias para la venta de pólvora, han hecho que en este momento se encuentre un solo proveedor, que es lo que ha disparado el precio, por lo que estas asociaciones demandan al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo que se facilite a las entidades festeras una relación de los diferentes proveedores a los que se pueden dirigir para conseguir la pólvora negra que precisan para la celebración de sus actos de arcabucería; y “sólo en el caso de que esto resulte imposible”, que se conceda autorización, con carácter excepcional y por tiempo limitado, a aquellas pirotecnias que reúnan las condiciones técnicas y de seguridad exigibles, para que lleven a cabo el suministro de pólvora negra a las poblaciones que en fechas próximas y en el curso de los próximos meses, se disponen a celebrar fiestas patronales que incluyen estos actos de disparo.

Además, también solicitan que se reubique la regulación relativa a la pólvora negra para arcabucería en el Reglamento de artículos pirotécnicos y cartuchería, trasladando al mismo el contenido íntegro de la Instrucción Técnica Complementaria 26.

También piden que se dispongan los ajustes procedimentales necesarios para facilitar que las pirotecnias que así lo deseen, y que cuenten con los medios técnicos y los elementos de seguridad necesarios para ello, puedan concurrir en este particular ámbito del suministro y venta de pólvora negra para arcabucería.

En cuanto a los plazos para el reparto de pólvora, piden que los participantes activos puedan almacenar en domicilios particulares, durante un período que como máximo discurrirá entre los 3 días previos al inicio de las fiestas y el inicio del último acto de arcabucería, un máximo de 2 kg. por porteador (o porteador-tirador) y que en lo tocante a los problemas relativos al reparto y trasvase de la pólvora sea modificado en el sentido de permitir que dicho trasvase se realice por los participantes en el domicilio particular.

Respuestas de las Administraciones y partidos políticos

Tanto el senador socialista por Albacete, Manuel Miranda, como el delegado provincial de la Junta, Pedro Antonio Ruiz Santos han trasladado a estos colectivos, durante las reuniones mantenidas esta semana, su compromiso por ejercer como intermediarios con el Estado con el propósito, tal y como aseguró Ruiz Santos, de “velar por la protección y continuidad de unas fiestas identitarias para muchos núcleos de población de la Comunidad Autónoma, con especial arraigo en la provincia de Albacete”, poniendo como ejemplo las Fiestas de Moros y Cristianos de Caudete, o las Fiestas Mayores de Almansa reconociendo su valor “cultural, tradicional, social y económico” y por lo tanto, exponiendo la necesidad de aunar esfuerzos compartidos entre Administraciones y colectivos festeros para “salvaguardar”, estas manifestaciones históricas y que forman parte de las propias señas de identidad de numerosos pueblos y localidades

El presidente del PP de Castilla-La Mancha y anterior alcalde de Almansa, Francisco Núñez, también ha mostrado el apoyo del Partido Popular a nivel nacional hacia los municipios y entidades festeras afectadas por las restricciones en el uso de la pólvora como elemento festivo, y ha anunciado que presentará iniciativas parlamentarias en las Cortes regionales para respaldar y mantener la cultura y las tradiciones populares, que nacen del consenso de los Ayuntamientos y de los propios colectivos sociales.

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