Fabra asume la compra de Valmor: “Hicimos lo que teníamos que hacer”
El senador valenciano y exjefe del Consell Alberto Fabra ha asegurado que tiene la conciencia tranquila en la adquisición de Valmor, “hicimos lo que teníamos que hacer para que las responsabilidades fueran las menos posibles para la administración, elegimos la opción menos gravosa para la Generalitat”.
Así se ha expresado el expresident de la Generalitat ante las preguntas de Bernardo Guzmán en una entrevista concedida este lunes a Radio Valencia de la Cadena Ser, “me encontré lo que me encontré”. Precisamente, la adquisición de Valmor por parte del ejecutivo valenciano está siendo investigada actualmente por la Justicia.
Fabra también se ha referido a la corrupción, que le lastró en la pasada legislatura, “no era nada fácil pero creo que hice lo que debía hacer, y volvería actuar igual”. Al respecto, ha apuntado que “con sospechas no podíamos generar confianza, y tomé una decisión porque había que hacer algo -en referencia a su 'línea roja'-”. No obstante, reconoce que fue complicado gestionar todo el tema de la corrupción, “ahora hay que dejar trabajar a la Justicia”.
“La moqueta une mucho”
El líder del PPCV también se ha referido al Consell que preside Ximo Puig gracias al apoyo en el gobierno de Compromís y al sustento parlamentario de Podemos, que aseguraba que también tienen casos que “escandalizan”, como el del “marido de no sé quien que ocupa un cargo en la Administración”.
Sin embargo, no ponía en duda su estabilidad, “la moqueta une mucho, y por no perder el Gobierno son capaces de justificarlo todo”. Además, lamentaba que estén “más preocupados en meter el dedo en el ojo del otro (el PP) que en gobernar”, al tiempo que afirmaba que en seis meses no ha visto “nada” que le haga pensar que la Comunitat Valenciana pueda estar mejor.
En este sentido, lamentaba que el ejecutivo de Puig y Oltra no ha tomado decisiones encaminadas a la creación de empleo, que considera fundamental, “de las 86 medidas anunciadas en Morella, ni una sola estaba destinada a la creación de empleo”, mientras que criticaba medidas como la eliminación del copago o el programa de gratuidad 'Xarxa de llibres', “el gratis para todos no es una buena medida para ser eficientes”, y abogaba por centrar los esfuerzos en la creación de empleo.
Financiación autonómica
Fabra también ha reclamado la necesidad del cambio de modelo de financiación “desde el sentido común”, algo fundamental para cubrir los servicios básicos, “se tiene que abordar para mutualizar la deuda, de forma que sea asumida y condonada por el Estado”. Y añadía que es un error los 1.300 millones de euros ficticios contemplados por la Generalitat a cuenta del nuevo modelo de financiación.
En cuanto a la relación PP-PSOE, Fabra considera que debe ser buena “en general” por la vocación de sentido de Estado de ambos partidos. Así, ha reconocido que le ofreció a Ximo Puig apoyarle en la investidura a cambio de que el PSPV respetara la lista más votada en los ayuntamientos tras las elecciones del 24 de mayo, “y dijo que no”. De este modo, el exdirigente popular ha explicado que el PSOE “se entregó a Podemos y otros partidos radicales para conseguir el poder y otras administraciones, y les está pasando factura”.
Apoyo a Bonig
El expresident de la Generalitat ha mostrado su apoyo a la actual líder del PP valenciano, Isabel Bonig, con quien ha asegurado que tiene una buena relación, “a mí me tocó dar un paso al lado y apoyar a la nueva dirección, porque somos un equipo”, al tiempo que ha confirmado que “por supuesto” dará su respaldo a Bonig si se presenta al congreso regional del PPCV, “hay que ser coherentes y leales. Yo contribuí en unas circunstancias concretas y ahora le toca a otras personas”.
Respecto a la pérdida de las elecciones, Alberto Fabra ha apuntado que la democracia es alternancia, “después de 20 años la gente pide más y busca otras alternativas”, así como ha justificado la derrota en el hecho de que se dio la “tormenta perfecta”, con crisis económica, infrafinanciación, paro y corrupción, “se juntó todo y aun así, ganamos las elecciones”.
Ahora, en el Senado, asegura estar mucho más tranquilo que hace un año, “es una experiencia nueva, centro mis esfuerzos en mi labor de senador y puedo hacer cosas que antes no podía hacer, como ir a comprar”.
