Análisis Halo: Spartan Strike, acción isométrica sin complicaciones

Es bastante comprensible que cuando una compañía cuenta con una gran franquicia, con todo un filón comercial que ya vende con solo mentar su nombre, traten de explotarlo de todas las formas posibles, lanzando secuelas, precuelas, remasterizaciones y spin-offs de todo tipo. Un claro ejemplo de lo que hablamos es Halo, franquicia de acción en primera persona creada por Bungie para la Xbox original allá por el año 2001 que se ha convertido en la auténtica bandera de las consolas de Microsoft.

A día de hoy el universo Halo abarca mucho más que videojuegos de acción. Tenemos cómics, figuras, series de televisión, películas y un larguísimo etcétera, sin olvidarnos de los famosos spin-offs capaces de sumergir a la franquicia dentro de un género completamente diferente. Ya lo hizo en el año 2009 el notable Halo Wars desarrollado por la tristemente desaparecida Ensemble Studios al apostar por la estrategia en tiempo real, y en 2013 volvieron a hacerlo desde Vanguard Games con el lanzamiento de Halo: Spartan Assault, título que apostaba por la acción desde una perspectiva isométrica.

Pues bien, el caso es que desde hace unos días ya está disponible para dispositivos iOS, Windows Phone y PC Windows su secuela directa, un Halo: Spartan Strike que está pasando más bien desapercibido tanto entre los medios como entre los jugadores.

Desarrollado nuevamente por Vanguard Games, Halo: Spartan Strike vuelve a apostar por todo aquello que funcionó en Spartan Assault. Es decir, nos encontramos ante una propuesta de acción sencilla desde una perspectiva isométrica, con una jugabilidad bastante directa y poco exigente para el jugador recién llegado. Es por lo tanto un título accesible que va a lo seguro, que tan sólo trata de cumplir con los estándares de calidad que se le deben exigir a cualquier producto lanzando bajo el nombre de Halo.

Quien espere una propuesta cinematográfica, con una historia hilvanada y momentos para enmarcar, más vale que siga esperando al lanzamiento de Halo 5: Guardians en Xbox One, porque Spartan Strike sólo usa la trama para dar algo de coherencia a las diferentes misiones que lo componen, nada más. La acción nos lleva a los sucesos acontecidos en el mítico Halo 2 de la primera Xbox, momento en el que el mismísimo Jefe Maestro tuvo que combatir al Covenant en el planeta Tierra.

Pero esto es una ficción dentro de otra ficción. Es decir, todo lo que hacemos tiene lugar dentro de un ‘simulador táctico’ desarrollado para entrenar a los soldados Spartan, planteándoles varias situaciones de combate dispares para ver cómo de bien se desenvuelven. Eso sí, este planteamiento no impide que muchas veces sintamos que nos estamos enfrentando una vez más a lo mismo de siempre: llegamos a una zona, acabamos con todos los enemigos, sobrevivimos contra una oleada y fin.

De hecho los primeros niveles de Spartan Strike sólo pueden calificarse de bastante pobres. Primero por su excesiva sencillez, segundo porque no ofrecen una variedad a tener en cuenta, y tercero porque aburre matar a los cuatro tipos de enemigos de siempre con las mismas armas, dado que, si más o menos todas son igual de efectivas, para qué nos vamos a complicar la vida buscando el mejor equipo posible.

Según avanzamos en el juego la cosa mejora un tanto. Nos encontramos entonces con enemigos más variados y algo más poderosos, las torretas defensivas ganan en importancia, al igual que el aprovechamiento del escenario para cubrirnos y atacar. También encontraremos nuevas armas extraídas de Halo 4, las cuales sí que consiguen aportar algo de sal a un desarrollo que va girando poco a poco hacia un campo un tanto más táctico.

Por supuesto también podremos montarnos en algunos de los vehículos ya vistos en los grandes juegos de la serie para sembrar el caos allá por donde pasemos. Y sí, es más divertido montar en el Warthog y disparar a todo quisqui que ir a pata de un lado a otro con nuestro rifle de asalto. En cuanto al héroe protagonista, echamos en falta la posibilidad de contar con un mayor número de habilidades, puesto que es un estilo de juego que se presta ampliamente a ello. Pegar tiros, realizar un ataque cuerpo a cuerpo básico o lanzar granadas se nos queda corto.

Halo: Spartan Strike ofrece un total de 20 misiones para un solo jugador que podremos completar en unas cuatro horas. Es decir, no es que sea el título más largo al que hemos tenido acceso, y teniendo en cuenta que tampoco destaca por su variedad, no nos queda otra que restarle puntos. Aunque eso sí, siempre nos queda volver a jugar cada misión activando diferentes calaveras, las cuales están ahí para ofrecer cierto desafío a los valientes, pudiendo elegir por ejemplo que los escudos solo se regeneren asestando golpes cuerpo a cuerpo, que la munición dejada por los enemigos al morir sea mucho menor o que perdamos escudos y armadura al disparar.

Otro punto a destacar es la posibilidad de seleccionar nuestro arsenal antes de comenzar cada misión, pudiendo elegir entre las armas humanas ya vistas en el universo Halo, como el rifle de asalto, el rifle de precisión, el lanzacohetes o la escopeta, a las cuales podremos añadir potenciadores a base de invertir experiencia. También podremos añadir habilidades a nuestra armadura, como la posibilidad de desplegar un campo de regeneración de energía, lanzar ataques aéreos o activar un sobrescudo.

Desde el punto de vista artístico encontramos todo lo que se puede esperar de un título Halo. Es decir, los diseños de personajes, vehículos y escenarios de siempre, puesto que desde Vanguard Games no han querido apostar por cambiar nada no vaya a ser que se rompa. Desde el punto de vista técnico se trata de un título bastante modesto que queda bien en nuestra tableta, pero que no destaca lo más mínimo en su versión de PC, donde de hecho cuenta con ciertos puntos muy mejorables.

Lo mejor:

Lo peor:

Conclusiones

ConclusionesAnálisis Halo: Spartan Strike, acción isométrica sin complicaciones

En definitiva, Halo: Spartan Strike es un título directo y sencillo, ideal para aquellos que quieran acceder a una propuesta de acción isométrica mientras esperan a Halo 5: Guardians. Desde luego dentro de su género encontramos muchos otros exponentes más variados y mejor construidos, por lo que tampoco puede decirse que resalte en absoluto, y mucho menos que ofrezca algo nuevo. Por poner un ejemplo de sus carencias, un modo cooperativo al estilo de lo visto en Dead Nation y similares le habría sentado de perlas.

Pero no, Spartan Strike simplemente toma lo visto en su predecesor y trata de aprovecharlo lo mejor posible. Al menos como punto positivo toca mencionar la eliminación de su molesto sistema de micropagos, de forma que si tuviéramos que optar entre uno u otro la elección sería más que clara.

Por: Daniel Moreno

Análisis Halo: Spartan Strike, acción isométrica sin complicaciones

04/23/2015

6 / 10 estrellas