Aena acordó con Almeida censar a cientos de personas sin hogar pero dos meses después las ha echado de Barajas

Apenas han pasado dos meses desde que el Ayuntamiento de Madrid y Aena sellaron un acuerdo para abordar conjuntamente la situación de las personas sin hogar que dormían en el aeropuerto de Barajas. El compromiso, anunciado con presencia de José Luis Martínez-Almeida, y el presidente del gestor aeroportuario, Maurici Lucena, incluía el realojo en recursos municipales prometido por el alcalde y la elaboración de un censo, a cargo de la entidad aeroportuaria. Sin embargo, el acuerdo entre ambas entidades ha saltado por los aires después de que Aena anunciara, a finales de la semana pasada, la expulsión definitiva e inminente de los 500 sintecho que pernoctaban en sus instalaciones.

Ese marco de colaboración entre ambos organismos ha quedado ahora en suspenso, después de que Aena haya tomado la decisión unilateral de romper “de manera unilateral” la colaboración institucional con el Consistorio para atender a las personas sin hogar que pernoctaban en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. Según ha expresado el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, la decisión del gestor aeroportuario de prohibir dormir en sus instalaciones, en particular en la T4, ha supuesto un “incumplimiento” de los acuerdos alcanzados y ha interrumpido un delicado trabajo de intervención social que se venía llevando a cabo desde el Ayuntamiento.

La ruptura entre ambas entidades se ha dado en ambas direcciones. A finales de la semana pasada, después de que Aena hiciera público que iba a desalojar a las personas que seguían pernoctando en sus instalaciones, el Ayuntamiento anunció que no acudirá más a las reuniones técnicas bajo el argumento de que dicha decisión no había sido comunicada en dichos encuentros.

El consistorio asegura que mantenía un canal de trabajo conjunto con la empresa pública para abordar la situación de estas personas desde un enfoque social, no coercitivo. En este sentido, el delegado de Urbanismo ha reprochado que si Aena “cree que echando a la calle por la fuerza a los sin hogar que pernoctaban en el aeropuerto se ha resuelto el problema, lo seguirá teniendo, pero en las puertas de las terminales”. Ha insistido en que gracias a la mesa de trabajo conjunta se había avanzado en una gestión coordinada “adecuada” y dentro del marco competencial de cada institución, y ha lamentado que esa dinámica haya sido abruptamente detenida.

Carabante ha recalcado la importancia del trabajo de los equipos de intervención social del Ayuntamiento, cuya labor se basa en generar un vínculo de confianza con las personas sin hogar, muchas de las cuales son reacias, al menos inicialmente, a acudir a los recursos municipales. “Esta decisión unilateral de Aena rompe precisamente ese trabajo social que estaba haciendo el Ayuntamiento de Madrid. En torno a 60 personas ya están siendo atendidas en el centro social del Pinar”, ha indicado.

Cruce de acusaciones entre instituciones

Uno de los aspectos más criticados por el Ayuntamiento ha sido el incumplimiento, por parte de Aena, de la elaboración de un censo que recogiese los datos de todas las personas afectadas. Desde el gestor aeroportuario, sin embargo, han argumentado que dicho censo no era necesario para que los servicios sociales municipales intervinieran, ya que, según su criterio, los equipos conocían de antemano a las personas que llevaban meses pernoctando en las instalaciones de Barajas.

En este contexto, el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, ha acusado este lunes al Ayuntamiento de Madrid de haber intentado “engañar” a la ciudadanía con la responsabilidad de las personas sin hogar que pernoctan en el aeropuerto de Barajas y ha opinado que ahora, con el nuevo recurso municipal para atenderlos, “todos hemos sigo testigos de que ha llegado tarde y mal”. Martín ha tachado de “irresponsable” que el Consistorio haya roto relaciones con Aena a raíz de que se haya prohibido a las personas sin hogar pernoctar en el aeropuerto y ha emplazado al Consistorio a “estar a la altura” y a “dejarse de pataletas” en este asunto.

A juicio del delegado del Gobierno, “el Ayuntamiento de Madrid ha llegado tarde y mal a este asunto”. “Y ahora lo que tiene es una magnífica oportunidad de hacer mejor las cosas. Si aprovecha este tiempo, podrá disponer de los recursos necesarios para atender a las que son sus competencias”, ha reseñado. Así, ha criticado seguidamente que el Ayuntamiento han intentado “confundir a toda la ciudadanía durante meses, haciendo perder el tiempo no solo a las administraciones, sino haciendo pasar por unas condiciones verdaderamente lamentables a centenares de personas”.

La alcaldesa en funciones también se ha pronunciado sobre el conflicto. Inmaculada Sanz ha mostrado su “profunda decepción” por la actitud de Aena y del Gobierno de España, al que acusa de haber roto toda posibilidad de acuerdo. Según ha recordado, el Ayuntamiento se había comprometido a asumir la gestión del centro habilitado para estas personas, mientras que la función de Aena debía centrarse en colaborar con la elaboración del censo.

“Es evidente que no tienen ninguna intención de cumplir con su parte, que era hacer el censo. No siempre es sencillo atraer a estas personas a los servicios municipales. Es una decisión profundamente cruel y viene a desbaratar ese trabajo que se había hecho”, ha declarado Sanz. A pesar de la situación, ha garantizado que el Ayuntamiento va a “seguir haciendo todos los esfuerzos” para continuar el trabajo con estas personas y tratar de retomar el contacto con quienes fueron expulsados del aeropuerto.

Sanz ha asegurado que los equipos de intervención social seguirán operando en la medida de sus posibilidades, aunque ha reconocido que el escenario actual complica notablemente la labor municipal: “Vamos a seguir haciendo todo el trabajo necesario para atender a cada una de estas personas. Los equipos de calle no van a dejar de trabajar, pero esto ha supuesto una complicación muy seria”.

Los recursos a disposición de los afectados

Según ha detallado el delegado del Gobierno, hay 50 personas pernoctando dentro del aeropuerto y unas 20 en el exterior. “El aeropuerto de Madrid tiene recursos más que suficientes para darse una solución a estas personas, que seguro los tiene, y tiene que seguir trabajando para reforzar esos recursos, ha señalado.

Fuente del Área de Gobierno de Políticas Sociales, Familia e Igualdad del Ayuntamiento han explicado a Somos Madrid que la decisión de Aena ha cortado de raíz el trabajo que estaban llevando a cabo los equipos de calle, que trataban de contactar y establecer relaciones con las personas sin hogar para convencerlas, sin coacción, de acudir al centro de emergencia habilitado en el Pinar de San José. Allí se alojaban entre 38 y 40 personas antes de la expulsión decretada por Aena; ahora hay 53, lo que desde el área liderada por José Fernández no consideran un aumento significativo, precisamente porque no todas las personas aceptan la ayuda ofrecida.

“La ley de Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid establece que esta atención debe ser aceptada voluntariamente por parte de estas personas. Por eso era tan importante no entorpecer el trabajo de los equipos de calle. La decisión de Aena ha interrumpido todo este trabajo de vinculación”, explican fuentes municipales.

El dispositivo desplegado en Latina se enmarca en un contrato de emergencia dotado con 932.000 euros y se encuentra operativo entre la segunda quincena de junio. El recurso incluye 150 plazas de alojamiento en régimen de pernocta (horario de 20.00 a 9.00 horas), con 20 de esas plazas complementadas con servicio de centro de día, es decir, operativas 24 horas. Asimismo, los usuarios reciben cena y desayuno en las propias instalaciones y también bocadillos para la comida, además de acceso a aseo, lavandería, consigna, ropero y tarjetas de transporte para desplazarse al centro

Desde el Ayuntamiento de la capital insisten en que su prioridad es seguir ofreciendo alternativas habitacionales y sociales a estas personas, y consideran que la vía represiva solo traslada el problema a otros puntos de la ciudad sin resolverlo. Al mismo tiempo, reiteran su voluntad de recuperar el trabajo conjunto si Aena muestra disposición para ello. Por su parte, el centro de emergencia de Pinar de San José se mantendrá abierto hasta mediados de octubre con 150 plazas y los equipos municipales continuarán desplegados intentando localizar a las personas expulsadas para reanudar con ellas un proceso de atención social que ahora se ha visto interrumpido.