Manuela Carmena todavía no descarta seguir siendo alcaldesa de Madrid
Esta mañana se ha desarrollado un acto en el que se descubría una placa colocada en memoria al pintor Eduardo Arroyo en la casa de la calle Argensola donde nació. A esta inauguración han acudido tanto Pepu Hernández (PSOE) como la alcaldesa en funciones Manuela Carmena, en su primera aparición tras la noche electoral.
Tras un breve y emotivo acto con la viuda de Arroyo, Isabel Azcárate, y el amigo de la familia y experto en gestión cultural, Alberto Anaut, tanto Carmena como Hernández han atendido brevemente a los medios de comunicación.
Lógicamente, las preguntas de la prensa se han centrado de inmediato sobre los recientes resultados de las elecciones municipales del pasado domingo y los distintos escenarios que se abren.
En primer lugar, Manuela Carmena ha querido dar las gracias a todas esas personas que le han hecho llegar, a través de las redes sociales, su reconocimiento y apoyo por la labor realizada en estos cuatro años; “Me encantaría poder contestar a todos quienes me han mandado muestras de cariño. Muchísimas gracias”, ha sentenciado. A continuación, se ha referido a la posibilidad de ser alcaldesa, algo que ha dicho que todavía no descarta, ya que como ha argumentado “Más Madrid ha ganado las elecciones y ahora estamos todavía sin desarrollar lo que pueden ser los pactos que puedan permitir que sea alcaldesa”. Carmena plantea esta remota posibilidad en el caso de que las derechas no lleguen a un acuerdo y en todo momento ha evitado referirse a alguna conversación con Ciudadanos. Desde el partido naranja se ha declarado que no se quiere la influencia de VOX e, incluso, en Barcelona, Manuel Valls ha abierto la puerta a Colau para evitar un alcalde independentista, aparcando los cordones sanitarios que la formación de Rivera marcaba tras las generales.
En ese sentido, las declaraciones posteriores efectuadas por Pepu Hernández volvían a colocar la pelota en el tejado de Ciudadanos, ya que el representante socialista ha incidido en que desde Europa se ha avisado a Ciudadanos de que se quiere aislar a la extrema derecha, por lo que dependería de ellos en qué sentido hacer de bisagra para facilitar un alcalde o alcaldesa en Madrid y no consentir la entrada de Vox en el gobierno municipal.
De aquí a la sesión de investidura del próximo 15 de junio queda mucha tela que cortar y mucha negociación, que también incluye al futuro gobierno regional. Lo que es evidente es que no está tan claro, como se hizo ver el pasado domingo, que alcaldía y presidencia vayan a ser para el PP.
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