Los 25 años de Subterfuge comenzaron en Malasaña

Correría el año 1998 cuando un amigo, que volvía de pasar el verano trabajando en Estados Unidos, me contaba: “Estaba jugando a una máquina de pinball en Nueva York y… la música me sonaba mucho ¡Era el Devil Came to me de Dover!”. Creo que ahí fui consciente del pelotazo que el sello Subterfuge había pegado con el grupo de las hermanas Llanos. Unos años antes, en 1989, todo aquello había empezado con un fanzine de música y cine de género del mismo nombre que, posteriormente, mutó en revista de historietas y duró hasta 1999. En aquellos noventa la gente de Subterfuge aún era parte de la fauna más reconocible de los corrillos de Malasaña: Carlos – y Gema – Subterfuge, Raúl Santos o, en menor medida, el hoy omnipresente Mario Vaquerizo. En Malasaña también comenzó Carlos Galán (conocido como Carlos Subterfuge) a patearse bares, repartiendo su fanzine, pergeñado en las oficinas que entonces tenía en Chueca. Ahora que cruzan el horizonte de su tercera década de vida, se inaugura una exposición llamada Viaje al centro de Subterfuge, que podrá verse entre el 13 de junio y el 7 de septiembre en el CentroCentro del ayuntamiento de Madrid (Plaza de Cibeles, 1).

Además, este año se quedan con el cartel al completo del Día de la Música, bautizado como DDM2014 The Big Stereoparty, y convertido en toda una fiesta a mayor gloria de Subterfuge.

Para la ocasión, se ha reunido a bandas míticas de la discográfica como Purr, Killer Barbies, Cycle, Australian Blonde , Sexy Sadie, Dover, Marlango, Najwa, Pauline en la Playa, Carlos Jean, Dr Explosión o Ellos. Muchos ya no están con el sello y algunos ni siquiera están en activo, caso de Los Fresones Rebeldes y Mercromina. Los conciertos serán los días 20 y 21 de junio en el Matadero. La celebración del 25 aniversario desplegará toda una memorabilia del sello en forma de cartelería, merchandasing, carpetas de discos o ilustraciones. Cromos con banda sonora de 25 años de pop que – siendo justos con la memoria que guardamos de la Malasaña más noventera – dejará a buen seguro fuera los chismes que se prodigaban sobre sus protagonistas y el muy comentado affaire con el entonces fanzine-apisonadora Mondo Brutto.

Coincidiendo con el décimo aniversario del sello, en 1998, los bruttos sacaron en portada a un Carlos Galán travestido de demonio. En el interior, éste protagonizaba una peculiar versión del Cuento de Navidad que es leyenda impresa de la crónica del corazón rockera …y que no gustó nada al factótum de Subterfuge, con quien estos tuvieron problemas legales. El resto de chanzas, un clásico del momento, tenían que ver con lo pijos o no pijos e impostados que eran unas y otras caras del pequeño underground de la escena -¿un tanto cateta?- de Malasaña. También con la autenticidad, y a este respecto a Subterfuge se le ha acusado en no pocas ocasiones de ser excesivamente comercial (El que esto firma acudió de extra en una grabación de Undrop en El Club Disney, lo que podría apuntar hacia la tesis de la comercialidad).

Sin embargo, un vistazo al catálogo histórico de Subterfuge en este cuarto de siglo no deja lugar a dudas de su exitosa y frenética actividad: Australian Blonde, Manta Ray, Mercromina, Dover, Mastretta, Najwa Nimri, Carlos Jean, Ellos, Fangoria, Los Fresones Rebeldes, Sexy Sadie, Mercromina, Undershakers, Pauline en la Playa, Lidia Damunt, Tulsa, Krakovia, Anni B Sweet…

Este año Subterfuge vuelve a ser el centro de muchas conversaciones , ha desembarcado en el centro de las instituciones públicas y el diablo lúbrico, que Miguel Ángel Martín convirtiera en su imagen, tapa con carcajadas las posibles críticas. Si aún las hubiera