Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Sánchez intenta recuperar el control cercado por los casos de acoso y corrupción
González Amador, alias Alberto Burnet: el ciudadano menos particular de Madrid
OPINIÓN | '¿Qué hacer para evitar la llegada ultra al poder?', por Antonio Maestre

Juzgan a dos policías locales de Oviedo por lesiones tras disparar a un vehículo que arrolló a un agente y se dio a la fuga

Interior de la sala de audiencias de la Sección Segunda con el tribunal, la fiscal y la acusación particular a la derecha y los dos agentes acusados en el banquillo.

Pilar Campo

Oviedo/Uviéu —

0

Dos policías locales de Oviedo se sientan desde este lunes en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Asturias por su presunta autoría en un delito de lesiones. Los dos agentes iban vestidos de paisano en un coche camuflado y una de las claves del juicio es dirimir si uno de ellos utilizó su arma reglamentaria de forma proporcional a la gravedad de la situación al disparar hasta en tres ocasiones contra un vehículo que se dio a la fuga, después de que su conductor se negara a entregarles la documentación cuando les fue requerida.

En su huida, el turismo arrolló en un pie a uno de los agentes y finalmente el coche pudo ser interceptado a un kilómetro de distancia del lugar donde se produjeron los incidentes tras solicitar el apoyo de otro vehículo policial.

De la huida a la denuncia

Al ser detenido, el conductor pidió en varias ocasiones perdón y dijo que “se había asustado” después de que uno de los agentes se colocara junto a su ventanilla mostrando una pistola, con la que según su versión, “le encañonó” y el otro agente se pusiera junto a la ventanilla del copiloto, donde estaba sentada su novia, temiendo que “pudiera pasarle algo a ella”.

El conductor sostuvo que no llegó a oir a los agentes que eran policías, ni vio que llevaran placas identificativas, ya que solo se dio cuenta de que “llevaban algo colgado en el cuello” que no pudo determinar, por lo que “se sintió acorralado” y solo quería marchar de la explanada donde estaba aparcado el vehículo, en San Lázaro de Paniceres.

Apuntes de Medicina y un ordenador

Según el relato de otros policías locales que declararon como testigos, la pareja estaba en un coche aparcado en un lugar habitualmente utilizado por jóvenes para actividades de trapicheo de sustancias estupefacientes al menudeo y como punto de encuentro para realizar carreras ilegales.

Los denunciantes estaban con un ordenador portátil y unos apuntes ya que estaban preparando exámenes de Medicina y habían elegido esa zona porque, según dijeron ambos, “era un lugar tranquilo al que habían ido en otras ocasiones”.

Imagen de la detención del conductor tras ser interceptado por los agentes de la Policía Local de Oviedo.

Tras la detención del conductor, al que esposaron en el suelo, un policía local pidió a la novia de éste, que se encontraba “muy nerviosa” que le acompañara hasta la explanada para ver si encontraban algún indicio, ya que “le parecía extraño” que hubieran huido y le resultaba más lógico que hubieran arrojado por las ventanillas previamente “sustancias estupefacientes u otros objetos”. La búsqueda no dio resultado, ya que los jóvenes solo tenían apuntes y el ordenador.

La llamada al 112

Otra de las claves del juicio está en conocer si la pareja sabía de antemano que eran policías y la fuga estaba relacionada con el hecho de que el conductor podría no llevar encima documentación. Para la defensa, es trascendental la llamada de auxilio que hizo la novia al 112 para comunicar el incidente y pedir ayuda.

En esa llamada, la joven explicó a su interlocutora que “estaban siendo perseguidos por unos que dicen que son policías” y esa frase demostraría, a juicio de los abogados defensores Andrés Martínez Ceyanes y María José Calderón, que los acusados se identificaron como agentes de la autoridad.

La lista para ir en coche camuflado

En la sesión de esta mañana prestaron declaración una vecina de la calle Luis José de Avila Fernández, que grabó la escena de la detención al salir a la terraza despues de que su perro ladrara “al oir las sirenas policiales” y cinco policías locales.

Uno de los policías explicó que los dos acusados estaban autorizados en una lista oficial para realizar el servicio vestidos de calle y en coches camuflados, sin ningún tipo de rotulación, ni distintivo policial.

De noche, lloviendo y con niebla

El abogado Daniel Prieto, que ejerce la acusación particular en representación de los dos jóvenes, por el contrario, incide en que ninguno de ellos supo que eran policías hasta que vieron el segundo coche policial rotulado y oyeron las sirenas del vehículo.

Los hechos ocurrieron sobre las nueve de la noche del 24 de junio de 2022. La pareja había aparcado en la explanada por la tarde y en el momento del incidente estaba lloviendo, había niebla y el vehículo estaba empañado, según el relato del conductor, que ha ratificado que eso no le impidió ver claramente la pistola del agente primero en el costado y más tarde cuando “le encañonó”.

“No ví que le atropellara”

El conductor manifestó que el policía pidió que abriera la ventanilla y llegó a “abalanzarse sobre el coche”. Él hizo la maniobra de marcha atrás y salió de la explanada de San Lázaro de Paniceres “a una velocidad normal” en dirección al barrio de La Florida.

Según sus palabras, no vio que atropellara en un pie al agente, ni le vio caer al suelo y a su compañero dirigirse a ayudarle.

Inicialmente la causa fue calificada por la acusación como un delito de homicidio por imprudencia intentado, una figura inexistente, que llevó a su modificación a un delito de lesiones. Según el letrado, las lesiones son “más psíquicas, que físicas”, especialmente por las secuelas que les provocó este incidente.

Las peticiones

Para el agente que disparó solicita una pena de dos años de cárcel y para su compañero una multa.

La Fiscalía pide el archivo del procedimiento penal al considerar que hubo proporcionalidad en la actuación policial, al igual que la defensa que solicita la libre absolución.

La declaración de los policías

El juicio continuará mañana, martes, con la declaración de los policías nacionales que estaban de servicio el día de los hechos, cuando el conductor fue trasladado a los calabozos del cuartel de Buenavista, mientras los agentes locales intervinientes eran atendidos en un centro de salud.

Los dos policías locales acusados han solicitado declarar en último lugar en la sesión prevista para el próximo miércoles, día 3, una vez terminada la declaración de los policías nacionales; una petición que ha sido aceptada por el tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Asturias, con sede en Oviedo, que enjuicia la causa.

Etiquetas
stats