Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Sevilla provincia: una partida con cien casillas y la Diputación en juego

Elecciones andaluzas 2015. / J.M.B.

Juan Miguel Baquero

La provincia de Sevilla se juega 105 alcaldías y casi 1.500 asientos de concejal. Es el legado que dejará la próxima cita del 24M. Con un número récord de candidaturas al calor de la revuelta coyuntura política –supera el centenar, entre partidos tradicionales y fuerzas emergentes y de corte localista–, la mayoría de pueblos caerá en las manos hegemónicas del PP o del PSOE. ¿Y Diputación? El ente provincial es el gran caramelo que fija la salivación electoral de los populares.

Amén de un profuso puñado de municipios, algunos del entorno de la Gran Sevilla, que bien pudieran cambiar de signo político si la decisión del electorado toca determinadas teclas. Caso del presumido descenso en número de votantes que arrastran PP y PSOE camino de las municipales. O las variables que aporten el reguero de listas alternativas.

El fajo de votos mutará las constantes vitales en más de una plaza. La política ficción pone en bandeja entonces la continuidad de la nómina de actuales alcaldes. Pocos se atreven a fijar su apuesta, si quedarán reeditadas las 39 mayorías absolutas y 27 relativas de los socialistas o las siete y nueve de los populares. ¿La decena de gobiernos en solitario de IU, quizás? ¿Dónde está el límite de partidos como Ciudadanos o de formaciones que representan la confluencia de izquierdas?

Ahí está el pastel. El río revuelto en el que todos quieren pescar. En 2011, el PSOE resultó vencedor de los comicios locales por escaso margen: 351.600 votos (un 36,43%) contra 333.136 votantes (34,52) del PP. La aritmética post electoral dirá si el vuelco en la provincia es viable. Si las cifras trazan un nuevo Gobierno socialista en la Diputación de Sevilla, como el mínimo pero suficiente escaño que torció la bisagra en la última legislatura: 16 socialistas por 15 de la oposición (diez del PP, cuatro de IU y uno del PA).

Dos Hermanas. Segunda ciudad de Sevilla, con unas 130.000 personas. Francisco Toscano (PSOE) acumula desde 1983 ocho legislaturas consecutivas como alcalde. Es de los regidores más longevos del país. En 2011 pasó de 18 concejales a 15, tres ediles que acaparó el PP para llegar a 9, con IU inmóvil en 3. Aun así, los socialistas mantuvieron una mayoría holgada que no aparece como sencilla de arrebatar.

Alcalá de Guadaíra. En torno a 75.000 habitantes. Sólo conoce un partido de Gobierno desde 1979: el PSOE. Y un alcalde desde 1995, Antonio Gutiérrez Limones. En los últimos comicios reeditó mayoría con 13 escaños (5 menos que en 2007) de 25. Pero la marcha de una edil (pasó a no adscrita) dejó en minoría a los socialistas frente a dos concejales de PA, uno de IU y nueve del PP. Todo, en una movida legislatura que registró dispares denuncias y acusaciones entre los grupos políticos. Motivo suficiente para que los populares intenten arañar fuerzas en plazas de este calibre.

Utrera. Noveno municipio más extenso de la provincia, supera los 50.000 habitantes. El Ayuntamiento lo gobierna el PA con Francisco Jiménez de primer edil desde el año 2003. El PSOE fue el partido más votado hace cuatro años en esta ciudad de La Campiña pero el pacto entre andalucistas y PP determinó el color de la Alcaldía. IU logró entonces un edil, igual que UPyD.

Écija. El censo supera los 40.000 astigitanos. Gobierna el PP, con Ricardo Gil Toresano como alcalde. La muleta aparece aquí a la inversa del caso utrerano, con el PA soportando la mayoría popular de nueve concejales por ocho socialistas, tres andalucistas y uno de IU. Apenas unos cientos de votos fueron determinantes y, el 24M –como en el resto de poblaciones– habrá que contar con las variables que presenta la actual cita electoral.

Aljarafe. La comarca más poblada y más próxima a la capital. Con suculentas plazas en juego. Caso de Mairena: el PP arrebató por vez primera el Ayuntamiento –con apoyo andalucista, que no entró en el Gobierno– al PSOE. Ricardo Tarno es alcalde y candidato a revalidar mandato mientras la oposición espera que la presunta implicación en el cobro de 'mordidas', según la Fiscalía, le pase factura. En Bormujos, la alcaldesa Ana Hermoso (PP) no repetirá. Un bolso de Loewe y supuestas corruptelas con el fondo del caso Gürtel tienen la culpa después de llevar a su formación de un concejal al Gobierno en 2005 tras una moción de censura bajo sospecha. En 2011, llegó a unos resultados sin precedentes con ocho concejales. Coria del Río queda en la incógnita tras el Gobierno en minoría del PSOE desbancado por otra operación de censura a mitad de legislatura que aupó a PA y PP. El plenario prevé cambios desde las cifras de hace cuatro años: diez ediles socialistas, seis andalucistas, tres populares y uno de IU e independientes. La suma determinará, también aquí, el nuevo Gobierno.

Etiquetas
stats