“Nos pagan 655 euros al mes por hacer habitaciones de hotel 8 horas diarias”
“En 2008 pasé de depender del hotel de 5 estrellas donde trabaja en Valencia a depender de una empresa, puesto que se externalizó el servicio de habitaciones; la consecuencia ha sido que me han incrementado las cargas de trabajo y me han reducido el sueldo de los 1.000 euros que ganaba a 655 euros, que con las dos extra se nos queda en 800 euros”.
Este es el testimonio de P. D. (prefiere no dar su nombre completo ni aparecer en fotos), una de las miles de camareras de pisos, como se conoce al personal asistencial de los hoteles, principalmente al que limpia y prepara las habitaciones, que sufre una auténtica explotación en su puesto de trabajo.
Según ha denunciado, “hay días que no tenemos tiempo ni para comer”. Por su parte, A. O., otra compañera que trabaja en un establecimiento diferente de la ciudad, también de lujo, asegura que toma “antidepresivos” para soportar “la presión y el nivel de exigencia” al que están sometidos. De hecho, asegura que ha estado varios meses “de baja por depresión”.
Sus casos son solo dos ejemplos de la precaria situación que atraviesa este sector. Para visualizar este problema, se ha presentado este martes el libro 'Las que limpian los hoteles', de Ernest Cañada. La obra recoge los testimonios de 26 trabajadoras que explican cómo se han ido deteriorando durante la crisis sus ya de por sí pobres condicones laborales.
Según han explicado Cañada, todas las entrevistadas coninciden en tres aspectos: La enorme sobrecarga de trabajo que soportan, la degradación de sus condiciones contractuales como consecuencia principalmente de la temporalidad y de la externalización del servicio de habitaciones y el agravamiento de la salud de las trabajadoras, mujeres en su mayoría, que padecen todo tipo de dolores lumbares y que en algunos casos se ven obligadas a trabajar infiltradas o a someterse a intervenciones quirúrgicas para seguir trabajando.
Representantes de los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO) y Unión General de Trabajadores (UGT) han acompañado a Ernest en la presentación del libro y han denunciado “los límites alarmantes de explotación” que padecen estas mujeres, más grave aún teniendo en cuenta que el sector hostelero en la Comunitat tuvo “un aumento de rentabilidad del 10% en 2015”.
Según los sindicatos, los sueldos de las camareras de pisos han bajado entre un 20% y 30% durantela crisis, una situación que afecta a un 30% de los 147.622 trabajadores de la hostelería en la autonomía valenciana.
