Oltra: “El camino hacia la derrota del terrorismo machista está lleno de trabas, pero es imparable”

La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha anunciado que el Pacto Valenciano contra la Violencia de Género tiene actualmente ejecutadas o en ejecución el 82% de sus medidas, en su segundo aniversario. “El camino hacia la derrota del terrorismo machista está lleno de trabas, pero es imparable”, ha exclamado.

En una comparecencia a petición propia en Les Corts para hacer balance del pacto, ha celebrado que “el relato compartido de unidad política y comprensión ciudadana ha permitido reconocer la violencia contra las mujeres como un conflicto social”, lo que ha cambiado la atención a las víctimas “en todos los niveles”.

Oltra ha arrancado con el nombre de Sheila, Andrea, Nalea, Beatriz, María Asunción, Rita y Elena, las siete mujeres asesinadas en lo que va de año a manos de sus parejas o exparejas y “la expresión más indecente de la violencia: Siete vidas rotas, acabadas precipitadamente cuando tenían muchos sueños por delante”.

En esta “lucha de todos”, el pacto surgió hace dos años, el 17 de septiembre de 2017, “en base al consenso y, sobre todo, en la no confrontación partidista” para transformar la sociedad y lograr la igualdad. “Es más fácil y rápido cambiar una ley que una mentalidad”, ha ilustrado la también portavoz del Consell.

El acuerdo, con vigencia hasta 2022, no es un programa de gobierno, sino un documento abierto y “en constante cambio” que fue el “precursor” del posterior pacto de Estado. Actualmente cuenta con un total de 1.009 adhesiones de entidades y 12.039 de particulares.

“Espacios libres de machismo”

Sus objetivos, “crear espacios libres de machismo”, “llamar a la puerta de las conciencias”, “romper la rueda de la violencia” y “crear un nuevo relato social que permita romper las barreras que invisibilizaban la violencia”. Oltra ha ensalzado así las políticas encaminadas a garantizar “una vida autónoma, segura, autosuficiente y libre” de las mujeres.

Entre ellas, la ampliación de las ayudas a los hijos de víctimas, de 6.000 a 75.000 euros, como “una indemnización más digna”. “Cuando matan a tu madre y te dan 6.000 euros, casi te están insultando”, ha recalcado, sumado a que ahora “no solo se contempla la muerte como indemnizable, también cuando la paliza ha sido tan grande que tu madre ha quedado no va a volver a trabajar en su vida”.

Paralelamente, las ayudas de alquiler social, los nuevos recursos para afectadas por trata o adicciones o la equiparación de las víctimas con las de terrorismo, junto a mejoras en formación, acompañamiento, atención directa e inserción y movilidad laboral de “las supervivientes”.

Otro logro es la multiplicación por nueve del fondo de emergencia, hasta 900.000 euros en 2019, para atender cuando “a las doce y media de la noche te encuentras en la puerta de tu casa, con los niños y las maletas, sin saber adónde ir y con el alma por tierra”, ha ilustrado Oltra. También ha resaltado que la renta activa de inserción puede llegar a 900 euros en la Comunitat frente a la media de 430 en España.

En general, el presupuesto contra la violencia machista ha subido un 150% desde 2015, con el cambio de gobierno, hasta 19,1 millones, “un esfuerzo sin precedentes que sitúa a la Comunitat muy por encima de otras como Andalucía, Madrid o Murcia; sextuplicando a Cataluña”. De cara al futuro, el Consell se mantiene “a la espera” de saber la dotación del pacto de Estado en 2020.

Nuevas masculinidades

Más allá de las víctimas, Oltra ha llamado a girar el foco hacia los hombres y generar “nuevas masculinidades”, algo puesto en marcha con talleres como los de prevención o los de 'pornomachismo', junto al esfuerzo por “desenmascarar el machismo” en publicidad, prostitución y medios de comunicación, con medidas como los 'puntos violeta' en festivales de música.

“Si el machismo nos ha intentado cortar las alas a las mujeres, a los hombres les ha impedido crecer en corazón o emocionalmente, algo que empieza desde que les dicen que 'los hombres no lloran'”, ha manifestado, recalcando que “es más fácil recuperar unas alas que un corazón dañado”.