Donostia acoge 37 ‘sorollas’ hasta octubre dentro del proyecto ‘Viajar para pintar'
El Museo San Telmo de Donostia inaugurará este sábado el proyecto 'Viajar para pintar' en el marco de las actividades conmemorativas del centenario de la muerte del pintor Joaquín Sorolla que llevará a distintas ciudades del Estado algunas de sus obras pintadas en ellas, en este caso ocho lienzos y 29 “notas de color”, pequeños bocetos en óleo sobre papel.
La muestra, organizada por la Fundación Museo Sorolla y el Museo Sorolla en colaboración con San Telmo y que podrá verse hasta el 15 de octubre, ha sido presentada este viernes por la directora de este espacio museístico donostiarra, Susana Soto, la comisaria Acacia Sánchez, técnico del Museo Sorolla, y el director de éste, Enrique Varela. Se podrá visitar con la entrada al museo, que los martes es gratuita, por Europa Press.
Según han explicado, 'Viajar para pintar. Sorolla en San Sebastián' es la primera exposición de un proyecto que recalará en diversas ciudades españolas, como Toledo o Valladolid, con el fin de que las obras del pintor valenciano puedan verse en el lugar donde fueran creadas y que expuestas junto a los fondos, en este caso de San Telmo, se contextualicen y se rinda homenaje a Sorolla que durante treinta años veraneó de forma intermitente en la capital guipuzcoana.
La primera vez que Sorolla visitó Donostia fue en 1889 y desde entonces y hasta 1921 viajó a la capital guipuzcoana pintando cuadros al óleo, acuarelas, cuaches y notas de color de paisajes y la vida de la ciudad. La comisaria ha explicado que la elección de la conocida como 'Perla del Cantábrico' por Sorolla para sus veraneos, junto a su familia, respondió al hecho de que aquí, por primera vez, “el artista se enfrentó a plasmar la luz del Norte” tan distinta de la del Mediterráneo, lo que le obligó a “cambiar su paleta de color y supuso un desafío”.
A ello ha añadido que desde que la reina Isabel II convirtió la capital guipuzcoana en su residencia de veraneo en 1845, la ciudad se convirtió “en punto de encuentro de la burguesía y la aristocracia entre las que se encontraban los clientes y amigos” de Sorolla que difundió el “veraneo elegante” en las playas donostiarras. La muestra se completa con cartas del artista y fotografías de la época, así como con un catálogo a color.
Sánchez también ha explicado que la relación entre Sorolla y San Sebastián no se limitó al ámbito artístico y de veraneo, ya que el pintor contó con muchas amistades entre la sociedad donostiarra como la de Darío de Regollos; Ignacio Ugarte, José Salís, el Doctor Madinaveitia, o Rogelio Gordón, entonces director de la Escuela de Artes y Oficios de Donostia.
Soto ha recordado que la colección permanente del Museo San Telmo cuenta con un total de 13 obras de Sorolla, tres de las cuales se pueden ver, además, en esta exposición, una de ellas donada por la familia de Madinaveitia y nueve donadas por Gordón.
Varela ha esperado que el proyecto 'Viajar para pintar' extienda la conmemoración del centenario del fallecimiento de Sorolla el 10 de agosto de 1923 más allá del “binomio Madrid-Valencia” y llegue así a todas esas ciudades que tuvieron cuya impronta pictórica tuvo “relevancia importante” en la obra de este artista.
Junto a la muestra, que ofrecerá visitas guiadas, el próximo 21 de junio a las siete de la tarde San Telmo acogerá una conferencia, con entrada libre, a cargo de Acacia Sánchez sobre este proyecto. Además, el 1 de octubre a las 12.00 horas, en la actividad la Obra del Mes del Museo, Lola Valverde ofrecerá la ponencia 'Iñudes y otras sirvientas: del lienzo a la vida real'. Finalmente, el 4 de octubre, a las siete de la tarde, Montserrat Fornells hablará de la vida y obras de Sorolla.
0