Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Israel se prepara para una ofensiva en Rafah mientras el mundo mira a Irán
EH Bildu, una coalición que crece más allá de Sortu y del pasado de ETA
Opinión - Pedir perdón y que resulte sincero. Por Esther Palomera

Los científicos cuestionan la fumigación de los montes para eliminar una plaga

Nieblas en las cimas de Bwindi, el bosque impenetrable de Uganda. fiverlocker (CC)

Alba Díaz de Sarralde

Implicación en patologías cancerosas, enfermedades neurológicas, problemas de reproducción y el papel que tienen como perturbadores endocrinos. Son algunas de las consecuencias de los pesticidas en la salud. Consecuencias que, de hacerse un uso indiscriminado y por medio aéreo, afectarían a la población.

Algunas instituciones vascas han decidido proceder a la fumigación aérea con óxido cuproso miles de pinos que se encuentran enfermos debido a un hongo que ha infectado 41.000 hectáreas de árboles. Este tratamiento aéreo ha sido elegido por las instituciones vascas para hacer frente a los tres tipos de hongo (Dothistroma septosporum, Lecanosticta acicola y Dothistroma pini) que han infectado al 33,15 % de esta conífera (40.914 hectáreas enfermas de las 123.432 que ocupa esta especie). La Academia de Ciencias Médicas de Bilbao (integrada por más de 20 sociedades científicas de ámbito provincial, autonómico e intercomunitario) ha solicitado a las Diputaciones, Gobierno vasco y Ministerio de Industria que desistan en el proyecto.

Las intenciones son fumigar por el medio aéreo con óxido de cobre, para lo cual las instituciones vascas han solicitado la autorización del Ministerio de Industria. Sin embargo, el efecto negativo que esta práctica tendría sobre la salud humana ha sido avalado por múltiples investigaciones internacionales.

Una práctica, de hecho, prohibida por Europa. En la Directiva 2009/128/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, en 2009, se señaló “la prohibición de las prohibiciones aéreas”, donde además se matiza que “podrá autorizarse solo en casos especiales” y con ciertas condiciones. Entre ellas, no haber ninguna alternativa, y en caso de estar la zona a fumigar “próxima a zonas abiertas al público, en la aprobación se incluirán medidas específicas de gestión de riesgo”.

Territorio repleto de caseríos

No sería esta la situación en Euskadi, según advierte la Academia en su comunicado: “Es obvio y bien conocido que nuestro paisaje rural está repleto de caseríos y casas de campo distribuidas por todo el territorio, por lo que afectarán siempre a sus habitantes al igual que a los animales, al agua, al aire y al medio ambiente en general”.

El texto recuerda, además, que durante más de 25 años Bizkaia y Gipuzkoa han sido fumigadas sistemáticamene con un pesticida llamado dimilin, que ya ha ocasionado daños al medio ambiente y a la salud. Aunque las intenciones sean ahora fumigar con óxido de cobre, la Academia advierte de que, de no usarse de una manera limitada y correcta, puede ser absorbido por el organismo y producir desde tos o dolor de garganta hasta dolores abdominales, dermatitis o daños en riñones e hígado.

La Academia de Ciencias Médicas de Bilbao quiere subrayar a las instituciones que el cobre se acumularía en la tierra y el agua como problema a largo plazo. Así, han solicitado firmemente la aplicación del Principio de Precaución y han pedido se desista del proyecto, promoviendo nuevas políticas forestales más sanas, ecológicas y sostenibles. La alternativa “más razonable” que propone sería fomentar la plantación de bosque autóctono respetando la biodiversidad, y ayudando a los forestalistas afectados económicamente para que promuevan estas prácticas.

Etiquetas
stats