Nuevo fuego cruzado entre Elche y el Consell, ahora por las subvenciones del IVACE

Elche y Valencia vuelven a chocar. Esta vez, por 50.000 euros, que es el importe de la subvención que el consistorio ilicitano no percibirá para mejorar la infraestructura del Parque Empresarial de Torrellano. Según el conseller de Economía Sostenible, Rafa Climent, que el municipio se haya quedado fuera de las ayudas del IVACE (Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial) se debe a la baja puntuación obtenida, que no ha llegado al mínimo requerido.

“Que el propio Ayuntamiento se autobareme por debajo del mínimo establecido demuestra la falta de ganas de trabajar por su municipio”, ha espetado el político de Compromís sobre el proyecto presentado por el consistorio ilicitano.

Estas palabras han causado “un profundo malestar e incomodidad” para el alcalde, el socialista Carlos González. Por ello, el regidor se ha apresurado en exigir al conseller Climent, “la rectificación inmediata” de sus declaraciones por considerarlas “innecesarias e injustificadas, además de impropias de un clima de colaboración y cooperación entre dos administraciones cuya finalidad no puede ser otra que atender las necesidades de los ciudadanos”.

Cabe recordar que en septiembre del año pasado el que fuera alcalde socialista de Elche, Diego Maciá, presentó su dimisión como director general de Industria por las desavenencias que tuvo precisamente con Climent tras retirarle algunas de las competencias propias de su cargo. En este sentido, el actual primer edil González llegó en 2015 a la secretaria general del partido primero, y a la alcaldía después, auspiciado por el sector que representa en la sombra Maciá.

Pero las luchas internas entre el PSPV-PSOE y Compromís no son nuevas y se llevan reproduciendo desde el principio del mandato. En el consistorio, donde ambos son socios de gobierno, mantienen sus discrepancias por el proyecto del Mercado Central. Mientras los socialistas optan por cumplir con el contrato que firmó el PP en el anterior mandato, los de Mireia Mollà insisten en romper con la empresa adjudicataria y buscar alternativas para el inmueble.

A este respecto, el conseller de Cultura Vicent Marzà, también de Compromís, se ha posicionado en numerosas ocasiones contrario al postulado del PSPV-PSOE al abogar, en una línea similar a la de la coalición, por la rescisión del contrato y la protección del actual Mercado Central.

Y en este sentido, y sobre protección del patrimonio local, el penúltimo rifirrafe entre administraciones que también ha causado malestar en el Ayuntamiento de Elche viene motivado por la paralización por parte de la dirección general de Cultura de la demolición prevista para el edificio de Riegos El Progreso. El concejal socialista José Manuel Sánchez, avanzó que interpondrá un contencioso administrativo contra la orden autonómica mientras que el Consell ha emplazado a la ciudad a que conserve la fachada de un bloque que albergó la sala de venta de agua.

El PP se solapa

El Partido Popular ha sido en la mañana de este martes la primera formación en salir a criticar la pérdida de la subvención para el polígono industrial de Torrellano. Pero lo ha hecho por partida doble, fruto del desencuentro que existe en sus filas entre el sector de la anterior alcaldesa, Mercedes Alonso, y el actual presidente, Pablo Ruz.

Mientras el secretario general, José Navarro, avanzaba en un comunicado que “las disputas entre PSOE y Compromís dejan a Elche sin subvenciones”, le seguía más tarde, con el membrete del grupo municipal del PP, la portavoz Alonso, para realizar la misma crítica que su compañero.