La Fiscalía de Castelló investiga la muerte a tiros del perro 'Marley' por un agente de la Policía Local
La Fiscalía Provincial de Castelló ha incoado diligencias de investigación penal por la muerte del perro Marley a manos de un agente de la Policía Local de Castelló. El teniente fiscal Javier Carceller considera “de forma provisional y a los solos efectos de su investigación” que los hechos, acaecidos el pasado 31 de mayo en el Grao de Castelló, podrían constituir un delito de maltrato animal.
El agente, según la versión de la Policía Local, localizó junto con su compañero dos perros “potencialmente peligrosos” y sueltos en las inmediaciones del domicilio de su dueña del que habían salido al quedar una puerta entreabierta. Al sentirse amenazado efectuó tres disparos que acabaron con la vida de Marley, un mestizo de bóxer y labrador de 58 kilos y 10 años de edad. Además, unos días después el mismo agente detuvo al hijo de la dueña por desobediencia a la autoridad en un chiringuito de la playa de Castelló, unos hechos que la familia también ha denunciado.
El abogado de la dueña del can tiroteado, Rafael Soriano Montero, de la sección de derecho animal del Ilustre Colegio de Abogados de València, denunció el caso ante la Fiscalía al considerar que la actuación del agente con número de placa 212 podría encuadrarse en un presunto delito de maltrato animal que el Código Penal con penas de entre tres meses y un año de prisión.
La sección de Medio Ambiente y Urbanismo de la Fiscalía Provincial de Castelló ha designado a una instructora que deberá practicar las diligencias pertinentes para la comprobación de los hechos denunciados, valorar su tipificad y establecer la posible responsabilidad del agente, según detalla el decreto del Ministerio Fiscal del pasado 17 de junio al que ha tenido acceso eldiario.es.
Así, en función del resultado de la investigación, deberá formular escrito de denuncia o querella o, por el contrario, archivar la causa si los hechos denunciados no resultan debidamente acreditados o no revisten caracteres de delito.
La dueña del can considera que el agente tenía otras alternativas (como hacer sonar el claxon del coche patrulla). Según la policía, el agente “no tenía otro recurso en su defensa personal que usar su arma de fuego”. La alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, también defendió la actuación de la patrulla. “Yo entiendo que un policía y que el cuerpo de Policía Local de Castelló, cuando saca un arma, es porque ya no tiene más remedio; y lo digo así de claro”, declaró en una entrevista con este diario.
1