'Performance' para recordar la lucha del Cabanyal
Los espectáculos que acoge en su vuelta el Teatre Musical de Valencia parecen estar empeñados en no olvidar, en rememorar el sufrimiento y la lucha del barrio donde se sitúa. Si la reapertura se convirtió en un reconocimiento a los colectivos que habían mantenido viva la zona ante la degradación, la performance que organiza este fin de semana la artista Esther Ferrer también tiene como propósito recordar la lucha de los vecinos.
Rescatar del olvido esta batalla reciente se hará a través de una marcha que cuenta con la colaboración de la plataforma Salvem El Cabanyal. Habrá cinco trayectos simbólicos, en los que se señalarán lugares claves del patrimonio histórico del barrio así como enclaves singulares de la lucha contra las excavadoras que tantas veces amenazaron el barrio marítimo. El punto de encuentro de las cinco rutas se producirá en la calle de Pavía. Allí, se confluirá para acabar ante el mar. A lo largo de la ruta se recordarán, además, los momentos más importantes del proceso judicial en contra de la ampliación de la avenida de Blasco Ibáñez.
Sin embargo, la actuación callejera también tendrá un punto de cotidianidad. Los vecinos con cintas marcarán los trayectos que realizan cada día. Con ello, trazarán un mapa de sus movimientos diarios, de los pasos que realizan cada mañana o tarde de forma habitual.
La acción artística titulada 'Se hace camino al andar' -un guiño a uno de los versos más conocidas de Antonio Machado- empezará con un coloquio que realizará la creadora. Una artista conocida por estos montajes con los que ha conseguido premios como Velázquez de Artes Plásticas del 2014 y el Nacional de Artes Plásticas del 2008.
La performance, no obstante, es el primer espectáculo de la serie 'Territorios compartibles/ la vida en escena'. Se trata de un proyecto de la valenciana Paula Valero, y en el que propone desplegar un campo de intervención e investigación sobre prácticas escénicas que superan los márgenes del propio teatro hacia las calles, como una versión artística más callejera. A esa transgresión de los límites físicos del teatro y su exportación a la calle, se invita a artistas, arquitectos, directores teatrales y teóricos de diferentes ámbitos a generar una actividad de encuentro con el vecindario del barrio y el público en general. Revitalizar el barrio y dignificarlo es el objetivo.