Lo Rat Penat concede al arzobispo Cañizares su premio 'Crit valencià de l'any'
En un año en el que el cardenal arzobispo de València se ha colocado en el centro del huracán por diversas polémicas (fundamentalmente críticas a la ideología de género, el colectigo LGTB, la inmigración, y especialmente con el gobierno progresista valenciano), la entidad conservadora Lo Rat Penat ha decidido otorgarle su premi anual 'Crit valencià de l'any' “por su firmeza, humildad, y valentía en la defensa de las tradiciones e intereses valencianos”, según ha indicado el presidente de la entidad, Enric Esteve.
La entrega del premio tendrá lugar este viernes, en el transcurso del solemne Te Déum que Lo Rat Penat organiza en el Monasterio de El Puig. Esteve ha aprovechado para reivindicar también la celebración del 'Te Deum' en la catedral de València el 9 d'Octubre, “parte fundamental en este día y en nuestra historia”, pero que quedará fuera de la celebración de la procesión cívica con su declaración como Bien de Interés Cultural. Con su exclusión desde el año pasado Cañizares se ha apoyado en las entidades conservadoras para mantener la presencia de la senyera dentro del templo durante la jornada.
Desde Lo Rat Penat se destaca que “Don Antonio tiene carácter valenciano, es de tierras valencianas (Utiel, 1945), y ese sentimiento lo ha llevado allí donde ha estado: es un defensor de todas aquellas entidades que apoyan lo valenciano, como Lo Rat Penat”, según el presidente de la entidad, que ha destacado también del Arzobispo su “capacidad intelectual, no sólo en el campo teológico sino en el histórico”.
En ocasiones anteriores el arzobispo ha hecho guiños a los sectores del secesionismo lingüístico. Así cabe recordar que Cañizares fue crítico con un 'obsequio' de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) cuando la institución oficial que regula la lengua le regaló un 'Oracional valencià' en el que se recogen textos evangélicos en valenciano. Pero el arzobispo hizo desprecio de la obra afirmando que “pienso que esto no conduce a la paz social que se necesita”. De esta forma el prelado rechazaba el trabajo de la academia que se basa en la unidad lingüística con el catalán, mientras semanas después sí se aceptaba un trabajo en línea similar presentado por entidades conservadoras partidarias del secesionismo.