València planta cara al absentismo escolar: 11 técnicos peinarán la ciudad para detectar casos
El Ayuntamiento de València quiere poner coto al absentismo escolar con un nuevo programa de acción dotado de más medios económicos y humanos.
La concejala de Educación, María Oliver, ha presentado este miércoles el plan que quintuplica el presupuesto existente hasta ahora, pasando de 65.000 euros a 334.000 euros, y aumenta el personal de 3 a 11 educadores y técnicos de integración social.
Oliver ha comentado que este servicio, competencia propia de las Administraciones Locales de “participar en la vigilancia del cumplimiento de la escolaridad obligatoria”, estaba abandonado por el anterior equipo de Gobierno municipal del PP, responsable del contrato que recientemente finalizado: “València era hasta ahora la gran ciudad que menos invertía en control del absentismo escolar”.
En dicho contrato se establecía la incorporación al programa de dos educadores sociales y un monitor de integración social, que junto al jefe de Sección municipal
debían dar respuesta a 387 expedientes de alumnos absentistas y 126 casos de expedientes abiertos en Fiscalía de menores.
Además, éste equipo debería ser capaz de colaborar en el seguimiento del absentismo de los 186 colegios públicos y concertados además de los 31 Institutos de Educación Secundaria.
“Obviamente, este equipo era insuficiente para cubrir el absentismo de la ciudad de
Valencia“, ha explicado Oliver.
El planteamiento técnico diseñado para el nuevo programa de Absentismo del Ayuntamiento de València que se aprobará este viernes en la junta de Gobierno ha diseñado un equipo de siete educadores y cuatro técnicos de integración social que actuará de forma descentralizada pero en coordinación con el servicio de Educación.
Dichos equipos desarrollaran su labor en diferentes espacios en una organización espacial de dos áreas y seis zonas: el área A incluirá la Zona 1 (Campanar), zona 2 (Russafa) y zona 3 (Patraix) y el área B incluirá la Zona 4 (Orriols), zona 5 (Algirós) y zona 6 (Grau-Port).
Cada una contará con un educador o educadora de referencia ubicado en el centro de juventud correspondiente, a excepción de Marítimo que por las características de su población escolar, contará con dos; para cada dos juntas habrá además, una persona técnica de integración social.
Según ha explicado la edil, el trabajo de seguimiento realizado en los centros durante los cursos 2015-2016 y 2016-2017, evidencia que es imprescindible dotar de más recursos humanos al programa, a fin de mejorar tanto la atención prestada a los citados centros, como por otra parte posibilitar dar cobertura técnica a un número importante de centros escolares que hasta ahora no la poseían.
El programa pone especial énfasis en la detección e intervención en casos de absentismo provocados por situaciones de acoso escolar, y en el ámbito familiar por situaciones de abandono, maltrato físico y/o psicológico, abuso y/o explotación sexual, y matrimonio no consentido.
Según Oliver, se concretará en el diseño, preparación, ejecución y control de actividades tendentes a procurar la asistencia regular y permanencia en el sistema educativo del alumnado absentista una vez detectada la situación y sus causas, a través de una intervención socioeducativa con todos los agentes implicados, y un diseño desde la perspectiva de género.
Así, se dará prioridad a dar respuesta a los problemas desde el ámbito socioeducativo y escolar, tratando de evitar acudir a instancias judiciales, ya que en la mayoría de los casos no es necesario si se realiza un trabajo previo bien planificado y disponiendo de los recursos humanos y materiales necesarios y adecuados.
