Bizkaia impulsa un plan de pensiones para los cuidadores de personas dependientes

La Diputación Foral de Bizkaia va a poner en marcha un Estatuto de las Personas Cuidadoras en un intento de dignificar esta forma de cuidados (muchas veces informales). Este Estatuto (en el que se invertirá 3,7 millones de euros al año) incluye la creación de una Entidad de Previsión Social Voluntaria (EPSV) o plan de pensiones para ayudar a que los 17.491 cuidadores de dependientes reconocidos en este territorio ahorren para su jubilación.

Además, se prevé la puesta en marcha de una escuela de formación, la realización de revisiones médicas para conocer las patologías más frecuentes como consecuencia del cuidado, y un período de descanso de 15 días financiado por la Diputación.

El plan de pensiones se nutrirá con las aportaciones de la Diputación y de los propios cuidadores. Dependiendo del grado de dependencia de la persona atendida, el Gobierno foral aportará 15 o 20 euros mensuales para los cuidadores, un desembolso condicionado a una aportación de la misma cuantía por parte de los interesados. La incorporación a este sistema será voluntaria, y se pondrá en marcha a partir del 1 de enero de 2019.

El diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria, ha subrayado que la Diputación ha decidido impulsar este estatuto tras constatar la “realidad” de que la mayoría de las personas mayores que necesitan cuidados (ocho de cada 10) desean ser atendidas en sus propias viviendas, y que en la mayoría de los casos son familiares directos quienes se ocupan de esta tarea. En muchas ocasiones, aparcan sus trabajos y se centran en cuidar a su familiar. “Hay que cuidar mucho y bien a quienes cuidan”, ha resaltado Rementeria.

Escuela de formación

Con esta iniciativa se prevé la puesta en marcha el próximo mes de septiembre, con el nuevo curso, de una escuela de formación en la que se impartan conocimientos sobre los principales aspectos del cuidado y sobre los recursos sociales y comunitarios para la atención de las personas con dependencia.

Tras pasar por esta escuela de formación, los cuidadores podrán obtener un “título oficial” que les pueda servir como una posible opción laboral.

Otra de las medidas del estatuto consistirá en un programa piloto mediante el cual se harán 90 revisiones médicas a otras tantas personas cuidadoras para conocer las patologías y lesiones más frecuentes derivadas de su actividad.

Quienes se adhieran al estatuto tendrán derecho a disfrutar de un periodo de descanso de 15 días en la red foral de residencias.