La Cámara de Cuentas sigue sin fecha para su reforma tras cinco años de promesas
Cinco años llevan los distintos partidos hablando en Andalucía de la necesidad de reformar la Ley de la Cámara de Cuentas, con casi tres décadas de historias, para entre otras cosas reforzar su capacidad de control, pero de nuevo este jueves se ha rechazado la propuesta de IU para pasar de las palabras a los hechos. La proposición de ley para modificar la norma que regula este órgano de fiscalización, que la coalición de izquierdas presentaba por tercera vez esta legislatura, no será tramitada tras cosechar sólo el voto a favor de Podemos.
El PSOE y C's han votado en contra y el PP se ha abstenido. Estos grupos han esgrimido distintas justificaciones para no apoyar la propuesta, y básicamente han coincidido en que para un cambio tan importante hace falta un consenso mayoritario en un Parlamento de Andalucía que ven demasiado fragmentado para ello. No fue obstáculo, sin embargo, que el PSOE y el PP se pusieran de acuerdo en vísperas de las últimas elecciones autonómicas para blindar sus cargos en el órgano y evitar que pudieran entrar los nuevos partidos que entrarían luego en el arco parlamentario, Podemos y C's. Debate que en todo caso, tocará de nuevo a final de año, cuando caduca el mandato de tres consejeros.
“Mucho te quiero perrito pero de pan poquito”, ha resumido Elena Cortés tras escuchar a los portavoces de los distintos grupos y después de que su formación, que ya incluyó esta demanda en el pacto de gobierno con el PSOE en la pasada legislatura haya visto correr la mitad de la presente sin novedades. En este sentido, Elena Cortés no ha conseguido explicarse cómo “sin razones de peso” se bloquea la tramitación de un texto que, como cualquier otro, puede modificarse con el trabajo entre los distintos grupos, como sin ir más lejos ha quedado escenificado este jueves con la aprobación de la Ley de Senderos elevada por Podemos.
La reforma de la Ley de la Cámara de Cuentas, de hecho, es también un punto del pacto de investidura de PSOE y C's y uno de los 135 compromisos de la legislatura lanzados por Susana Díaz con el inicio de este mandato. “Reformar la Ley de la Cámara de Cuentas para reforzar la obligatoriedad de colaboración de las administraciones con la acción fiscalizadora de este órgano, estableciendo la posibilidad de imposición de multas coercitivas a los responsables públicos que no rindan cuentas”, apuntó la presidenta hace dos años. Pero, sin embargo, esta iniciativa legislativa ni siquiera figura en el compromiso normativo de este año aprobado por el Consejo de Gobierno.
Entre las propuestas del texto elevado por IU figuran, como cambios más destacados, la ampliación de la capacidad fiscalizadora, la elaboración de dictámenes en materia de lucha contra la corrupción, la capacidad para advertir y detectar nuevas formas y prácticas de corrupción, la inelegibilidad de los cargos electos, la presentación de la cuenta general cuando se registran en el Parlamento de Andalucía los presupuestos autonómicos y no a los dos años y la imposición de retenciones y sanciones disciplinarias a entidades, personas y autoridades por no colaboración.
El caso es que no será en este periodo de sesiones visto lo de este jueves. Desde el PSOE, Jesús María Ruiz se ha alineado con el dictamen contrario a esta tramitación emitido por el Consejo de Gobierno y ha emplazado al conjunto de grupos a buscar “un consenso amplio para una reforma” que espera “que vea la luz lo antes posible”.
Dada la falta de plazos, el PP, pese a que tampoco ha apoyado la toma en consideración, porque “hace falta mucho consenso”, sí ha prometido hacerlo si en octubre IU la mantiene y los grupos no son han sido capaces de trabajar “en un texto entre todos” para iniciar la reforma. Lo ha dicho el diputado José Antonio Miranda, para quien la de IU “es una buena propuesta para modificar una ley que se encuentra anticuada y que hay que adaptarla a los nuevos retos”, si bien discrepan en “bastantes puntos”.
También C's ha coincidido, por boca de Julio Díaz, en que “tras tras 29 años de vigencia de esta norma se hace necesario una reforma en profundidad”, pero no se ha querido comprometer con plazos. “Nos gusta la música pero no la letra, por lo que C's va a continuar con su propia hoja de ruta en la modificación de la Cámara de Cuentas”, ha soltado.
IU sólo ha encontrado complicidad en Podemos. Carmen Lizárraga ha opinado que “es una oportunidad para mejorar la rendición de cuentas y evitar que se incumplan los plazos vigentes”. Es más, cree que la situación actual arroja ejemplos que no son aceptables: “Esto es un cachondeo en el que hay municipios que siguen regateando los plazos para presentar sus cuentas generales, donde menos del 20% las presentan en tiempo y forma”.