Hasta Japón sabía qué hacer ante la dana: la jueza elogia las medidas que adoptó la Embajada nipona
La jueza de la dana ha elogiado las medidas transmitidas a sus nacionales por la Embajada de Japón en España ante la catástrofe del 29 de octubre de 2024, trágica jornada que dejó 230 fallecidos. La magistrada instructora, en un auto dictado este miércoles, manifiesta que “ha de tenerse en cuenta que efectivamente constituye otra institución, en este caso una legación diplomática, que conocía y adoptó medidas de protección, en este caso de sus nacionales”.
La instructora alude a los “correos electrónicos consulares a los japoneses residentes en España para alertarles de la situación”, según confirmó la embajada a este diario. Fue la víspera de la catástrofe.
En el correo, la legación diplomática recogía las advertencias que había colgado en la web de Protección Civil (dependiente del Ministerio del Interior) y que se basaban en los avisos y predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Además de resumir a sus ciudadanos de manera clara y por días y zonas a qué fenómenos se enfrentarían —“el día 29 será el de mayor deterioro climático, con pronósticos de lluvias torrenciales y tormentas en las siguientes áreas: Zona del Estrecho de Gibraltar, Este de Andalucía, Región de Murcia, Este de Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana”, dio unos consejos claros.
La jueza reitera que, “efectivamente”, la dana “no fue un fenómeno meteorológico imprevisto” y recuerda que la Universitat de València (UV) “y otros entes públicos adoptaron medidas al respecto”.
La “constatación de las medidas”, tales como la suspensión de la docencia en la UV y en diversos municipios, tiene “relevancia”, a ojos de la instructora, “por un doble motivo”. Por un lado, “por el hecho de que no se disponía de mayor información de la que manejaba la Generalitat”.
Y, además, porque “constituía un ejemplo de que se debían de adoptar medidas para proteger a la población que por su difusión y cercanía no se podían desconocer por la Conselleria de Interior, y debieron servir de alerta de la gravedad de la situación y la necesaria adopción de medidas de prevención”, agrega el auto.
Negativa a las diligencias con ironía
La resolución deniega las diligencias propuestas por la Associació Mai Més, que ejerce una de las acusaciones populares en la causa, respecto de las medidas remitidas por la Embajada de Japón. Mai Més pretendía que se oficiara a la embajada para que se aportara la traducción al castellano del envío masivo del e-mail (“incluyendo los adjuntos”) a sus compatriotas residentes en España y a los turistas japoneses registrados en España en aquellas fechas.
La acusación popular solicitó que se requiriera a la legación diplomática una explicación sobre “qué información disponía en el momento del envío de los correos, de sus fuentes de información y del número de destinatarios de los correos”.
La jueza tira de ironía para justificar la negativa a aceptar las diligencias: “Si no se atendió a lo que decidía la Universitat era ciertamente difícil que se conociera lo que indicaba la Embajada de Japón”.
0