El anuncio de Ford de abastecer de motores híbridos a Europa desde Almussafes insufla optimismo a sindicatos y Consell
El anuncio de que la factoría de Ford en Almussafes será la planta europea que fabricará la próxima generación de motores híbridos para el mercado continental, ha supuesto una inyección de optimismo en los sectores económicos valencianos, desde los sindicatos hasta el propio Consell de la Generalitat.
Después del varapalo sufrido con el anuncio de un expediente de regulación de empleo (ERE) que supondría un total de 630 despidos planteados por la compañía, la automovilística del óvalo también ha avanzado el aumento de capacidad de la planta de ensamblaje de baterías a partir de 2022. Para ello ha confirmado una inversión adicional de 5,2 millones de euros, tras una inversión inicial de 24 millones para la puesta en marcha de la instalación en septiembre del año pasado.
UGT, sindicato mayoritario en la fábrica valenciana, ha señalado: “Es de vital importancia haber conseguido el motor híbrido que durante tanto tiempo veníamos reclamando. Aunque no resulte la solución definitiva, se trata de un paso muy importante en ese camino para ganar nuestro espacio en la electrificación de Ford Europa”.
“Para algunos puede tratarse de una situación agridulce”, admiten desde UGT, pero el sindicato ve “la botella medio llena”, ya que esta adjudicación tiene que servir para que la empresa muestre su voluntad de querer llegar a acuerdos. No encontrará en UGT “argumentos o excusas” para no alcanzarlos.
Ante este nuevo escenario, UGT vuelve a la mesa de negociación sobre los despidos con ánimo de “proponer soluciones que permitan mantener la paz social en la fábrica”“ y considera fundamental ”alcanzar un acuerdo que contemple el 100% de salidas voluntarias“.
Desde STM-Intersindical Valenciana, su portavoz Paco González ha valorado la “buena nueva” de que será la planta de Almussafes la que fabricará los motores híbridos de los modelos para Europa y ha querido “felicitar” a la plantilla por “convertir esta factoría en una de las mejores del mundo”.
González espera que la multinacional otorgue también nuevos productos para las plantas de fabricación de vehículos que garanticen su futuro, más ahora que se dejará de fabricar el Mondeo. En todo caso, confía en que los nuevos anuncios de la compañía permitan “reducir” la cifra de 630 despidos planteados en el ERE y que “no haya ni un solo despido traumático”.
Por su parte, el portavoz de CCOO en Ford Almussafes, José Arocas, ha expresado su “alegría” por la inversión en motores, reclamada por los sindicatos desde hace año y medio. Ahora, exige que se adjudique carga de trabajo para las plantas de fabricación de vehículos, dado que a finales de 2023 se van a dejar de fabricar cuatro modelos.
Finalmente, el portavoz de CGT, Mariano Bosch, ha manifestado que es una “noticia positiva”, a la espera de conocer el alcance de producción que conllevará y espera que sirva para minimizar el impacto del ERE. También ha pedido que se garantice carga de trabajo para las plantas de fabricación de vehículos. “Solo de motores no vivimos”, ha advertido.
Ximo Puig: “Extraordinariamente importante”
El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha considerado “extraordinariamente importante” la decisión de Ford y cree que “la multinacional norteamericana manda señales de que se queda en Europa”. “Si se queda, la planta de Almussafes tiene garantías de continuidad, eso es lo más importante”, ha asegurado el presidente.
A su juicio, “la automoción experimenta un momento de transición energética muy importante y se mira al vehículo eléctrico con toda la fortaleza, lo cual es importante para mantener el empleo”, al tiempo que ha relacionado la decisión de Ford con la iniciativa de la Alianza Valenciana de las Baterías, presentada recientemente, que aspira a construir con la ayuda de los fondos europeos de recuperación una gigafactoría de baterías eléctricas.
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