Carlos Fabra, entre la prisión y el indulto
Si ha habido un símbolo del poder en tierras valencianas en los últimos tiempos, ése no ha sido otro que Carlos Fabra. El 2 de octubre de 2013 comenzaba el juicio al exbarón provincial popular por el conocido como caso Naranjax, una causa que acababa con la condena al expresidente de la Diputación y el PP castellonense a 4 años de prisión por delitos contra la Hacienda Pública al considerar la sala demostrado que defraudó cerca de 700.000 euros entre 1999 y 2003. La pena fue confirmada posteriormente por el Tribunal Supremo.
Mientra Carlos Fabra recurría la sentencia -incluso llegó a afirmar que si le esperaba la cárcel, tendría que hacerlo “una larga temporada”-, Fiscalía y la Abogacía del Estado solicitaban aumento de la pena -de 4 a 8 años-. En aquel momento, incluso el exdirigente popular castellonense llegó a descartar una vez conocida la sentencia la petición de indulto.
Sin embargo, Carlos Fabra, el del aeropuerto más famoso de España, decidió finalmente acogerse a su derecho constitucional de solicitar el indulto el pasado mes de agosto -días antes de la fecha en la que había sido citado para comunicarle su encarcelamiento- para “ganar tiempo” al tener “asumida” entrada en prisión, justificando su petición en que su conducta era “acreedora” de la medida de gracia.
Esto sucedía apenas unas semanas después de que un grupo de militantes populares -entre ellos algunos dirigentes del partido en Castellón- decidieran poner en marcha una campaña para demandar el indulto del expresidente de la Diputación. Sin embargo, esta iniciativa contaba con el rechazo de la dirección del PP castellonense -Javier Moliner llegó a afirmar que ningún dirigente de la provincia rubricaría la petición- y de la Comunitat Valenciana.
El 10 de septiembre, la Audiencia Provincial de Castellón acordaba suspender la entrada en prisión de Carlos Fabra mientras se tramita la petición de indulto, de acuerdo con el artículo 4,4 del Código Penal. Si el exdirigente provincial del PP recordaba a sus compañeros de partido que su solicitud ha sido dirigida al Gobierno, desde la oposición han criticado duramente la decisión de la Audiencia.
Así, han denunciado la diferencia de criterio respecto a otros casos, en los que los condenados han tenido que esperar en prisión la decisión acerca de sus peticiones de indulto, al tiempo que reclamaban del Consejo General del Poder Judicial que investigue la actuación de la Audiencia de Castellón, “por el bien y la credibilidad de la justicia, de los jueces y del estado de derecho”.
Es más, desde el PSOE han anunciado que presentarán una proposición en el Congreso de los Diputados para instar al Gobierno a que deniegue de forma inmediata la solicitud de indulto de Carlos Fabra ante la “alarma social” generada. Y mientras el ministerio de Justicia decide, uno de los símbolos del poder político de los últimos tiempos, con una condena en firme a cuatro años de prisión, sigue esperando 'en casa' para conocer su futuro, el indulto o la cárcel.
