Euskadi cambia de planes y pagará los 200 mensuales por hijo a todas las rentas para fomentar la natalidad

El Gobierno de Iñigo Urkullu ha decidido hacer “universales” las ayudas de 200 euros mensuales hasta los tres años (7.200 euros en total) para las familias que tengan hijos. Esto implica la eliminación del tope de 100.000 euros de renta propuesto inicialmente y que personas con cualquier tipo de nivel económico puedan beneficiarse de ellas. Así lo ha confirmado este viernes en el Parlamento Vasco la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal durante la presentación de los presupuestos de 2023. Esta previsión ha disparado a más del doble el gasto en el área de familia, según Artolazabal. Llegará a los 152 millones.

La ayuda fue la propuesta estrella anunciada por Urkullu en abril en una sesión parlamentaria monográfica para combatir el envejecimiento en Euskadi y fomentar la natalidad. Los planes del Ejecutivo pasan por aprobar el decreto que active estas prestaciones en el “primer trimestre” de 2023, esto es, casi un año después de la presentación del plan. Eso sí, ya se conocía que eran para 2023. Asimismo, Artolazabal ha dejado claro que tendrán carácter retroactivo con efectos desde el 1 de enero del año que viene. Esto supone que los nacidos a partir del 1 de enero de 2020 podrán ser beneficiarios, ya que se abona la ayuda mensual hasta el que menor alcance los 36 meses. En el caso de que no se complete todo el período, se abonaría una cuantía proporcional.

“Esto, además, está alineado con un programa de los Primeros Mil Días de Vida promovido por Unicef. El objetivo es aumentar en un 15% la natalidad y reducir en un 20% la tasa de pobreza con familias de hijos e hijas. Va a ser una ayuda derecho subjetivo, va a ser una ayuda universal, y, por lo tanto, va a ayudar a todas las familias independientemente de su condición”, ha explicado en la Cámara Artolazabal, que en todo caso ha prometido facilidades para las familias que no presente declaración del IRPF, que percibirán el ingreso de manera “directa”. 

Y ha añadido: “Siendo Euskadi la comunidad autónoma que más inversión realizaba en esta cuestión, los datos de natalidad y los datos estadísticos no son buenos. Y, por lo tanto, en esa evaluación decidimos poner en marcha otro proyecto. Ustedes saben que las bonificaciones en Euskadi son elevadas pero que las ayudas directas son más bajas respecto a otros modelos europeos. Y, en esa reflexión, decidimos apostar por la puesta en marcha de una nueva ayuda de 200 euros de cero a tres años, que implica un esfuerzo económico muy muy importante para el Departamento y para el Gobierno en su conjunto, con el objetivo de ver si esa puede ser la palanca de cambio”.

Minutos después, también en la Cámara, el consejero de Educación, Jokin Bildarratz, ha anunciado una partida de 61 millones de euros para “reforzar la financiación del consorcio Haurreskolak”, que son las guarderías públicas. Con ello, “en consonancia con la estrategia vasca 2030 para el reto demográfico”, se logrará “la gratuidad” en esta red “a partir del curso 2023/2024”. Educación es la segunda cartera con más fondos después de Salud y el año próximo tiene el reto de ir aplicando las medidas previstas en el pacto para la reforma educativa, entre ellas un decreto para evitar la segregación en la escuela concertada.