Las obras de la Puerta del Sol seguirán durante el verano y se extenderán más allá de septiembre

Las obras de la Puerta del Sol, la promesa electoral de Almeida que finalmente no pudo inaugurar antes de las elecciones, tienen todavía un largo periodo de trabajos pendiente. El Ayuntamiento de Madrid acomete desde finales de junio y durante todo el verano algunas actuaciones que quedaban y que estaban pendientes de los permisos de Metro.

En concreto, los trabajos se centran en la sustitución del ascensor que se encuentra al este de la plaza (frente a La Mallorquina) y de una serie de rejillas de ventilación que no cumplían las condiciones de accesibilidad. También están sustituyendo una losa de hormigón en mal estado donde se ubicará definitivamente la Mariblanca, así como una galería de servicios frente a la sede de la Comunidad de Madrid cuya cubierta debe ser reparada.

El área de Obras explica que cada actuación se hará de forma individual y consecutiva, para minimizar las molestias y evitar poner excesivos obstáculos para la movilidad en la plaza. “Quedarán completamente acabados a finales de agosto, al igual que las obras en todas las calles aledañas”, aseguran en nota de prensa.

Los retrasos, según el área que dirige Paloma García Romero, se achacan a que la Puerta del Sol tiene una afluencia peatonal de más de 250.000 peatones al día, por lo que “ha sido necesario acometer las obras por partes para minimizar las afecciones a los establecimientos comerciales, a las labores de carga y descarga y a los numerosos transeúntes”.

La marquesina aguantará varios meses

Lo que sigue siendo una incógnita es lo que pasará con la marquesina de entrada al Cercanías, la ballena de Sol. El área de Obras explica que aún no tiene autorización de Adif para su desmontaje, pero que trabaja “en la firma de un convenio que habilitará a la entidad ferroviaria a realizar la supervisión y aprobación de estos proyectos”.

Después de obtener la aprobación y la correspondiente autorización de obras, el Ayuntamiento podrá sustituir los elementos responsabilidad del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, mediante un concurso público.