ILP de RTVV: Cuando la mayoría parlamentaria desvirtúa la voluntad ciudadana
En febrero del año pasado, apenas tres meses después de que el Consell de Alberto Fabra ejecutara Canal 9 y Radio 9 cortando sus emisiones tras la declaración de nulidad del ERE presentado en RTVV, se presentaba en sociedad una plataforma ciudadana -compuesta por gente de la cultura, la ciencia y la empresa- con el objetivo de iniciar una recogida de firmas para impulsar una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para reclamar la reapertura del ente público.
Los promotores -entre quienes se encontraban el rector de la Universitat de València, Esteban Morcillo; los escritores Rafael Chirbes o Joan Francesc Mira; la periodista Carmen Amoraga; el presidente de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, Ramón Ferrer o el presidente del sindicat d'Actors i Actrius Professionals Valencians, Ferran Gadea- lograron reunir unas 90.000 firmas que avalaban la petición de reabrir una radio y una televisión públicas y en valenciano, aunque “diferentes a las anteriores”.
Fabra “abre” una puerta
El Consell, desde el primer momento abrió la puerta a estudiar y debatir la ILP, aunque aclarando que las circunstancias por las que se había decidido cerrar RTVV “no han cambiado”. Es más, incluso el president Alberto Fabra, durante el debate de política general del pasado mes de noviembre -a escasos seis meses de las elecciones autonómicas- se mostraba abierto al diálogo y dejaba entrever la posibilidad de reabrir Canal 9 y Ràdio 9 siempre que se dieran “otras circunstancias”, en un contexto económico más favorable que permitiera un modelo “solvente y ajustado a las necesidades de los ciudadanos”.
Enmienda a la totalidad
En este contexto, llegaba el pasado mes de febrero la iniciativa a Les Corts, donde era recibida con una enmienda a la totalidad del PP, que presentó catorce modificaciones que desvirtuaron el documento inicialmente presentado por la Comisión Promotora y avalado por alrededor de 90.000 valencianos.
Así, pese a las advertencias de los promotores de que el texto “no era negociable”, los populares adaptaron la iniciativa a las condiciones marcadas en su día por Alberto Fabra, de modo establecía como “exigencias” para la reapertura de la radio y televisión públicas que no suponga un incremento de la deuda pública, ni un incremento de los criterios de estabilidad y déficit público; que no afecte a las partidas de sanidad, educación o bienestar social; que no repercuta en una subida de impuestos; que previamente se debe producir la liquidación definitiva de RTVV; así como que sean firmes las resoluciones judiciales pendientes, la disolución y liquidación del ente público y el ERE. El PP también introdujo enmiendas para que el servicio se diera en los dos idiomas oficiales, “preferentemente en valenciano”, y que la titularidad del servicio sea pública pero dejando abierta “cualquier modalidad de gestión”.
Estas modificaciones no gustaron nada a los promotores de la ILP, al considerar que se “vulneraba” la propuesta e impedían la reapertura a corto plazo de RTVV, al tiempo que criticaban que el PP quiere una televisión “privada y en castellano” en lugar de una “pública y en valenciano”.
Debate de un texto “adulterado”
Finalmente, esta semana llegaba a Les Corts la ILP, aunque con un texto “adulterado” según sus promotores, ya que “no responde ni a la letra ni al espíritu” de la propuesta original, enmendada de forma que sea inviable en la práctica la recuperación del servicio de radio y televisión públicos y en valenciano, “en realidad se abre la puerta a un servicio privatizado, intervenido políticamente y en castellano, exactamente lo contrario de lo que se pretendía”, “adulterando la voluntad de miles de ciudadanos a quienes se engaña”.
La iniciativa -adaptada por el PP a su voluntad- era aprobada por la mayoría absoluta del Partido Popular frente a las protestas de los grupos de la oposición, que decidió no participar en la votación final, además de comprometerse de nuevo a la reapertura de una radiotelevisión públicas. El síndic de Compromís, Enric Morera, incluso se atrevió a dar una fecha para retomar las emisiones, el próximo 9 d'Octubre.
