La futura alcaldesa del PP insiste en gobernar en minoría en el Ayuntamiento de València

La vencedora de las elecciones municipales y próxima alcaldesa de València, María José Catalá, ha insistido este lunes en su idea de gobernar el Ayuntamiento de la capital valenciana en solitario, con los 13 concejales obtenidos, buscando pactos puntuales con el resto de fuerzas, con Vox como aliado más factible (4 concejales), para sacar adelante proyectos y presupuestos.

Así lo manifestó este lunes por la mañana Catalá en declaraciones a À Punt: “Gobierna la lista más votada si no hay una mayoría que sume 17 en València y en el caso de la izquierda no suma suficiente y la lista más votada es el PP, que tiene 13 regidores. Es cierto que tendré que buscar con otras fuerzas acuerdos puntuales en los presupuestos o en las ordenanzas, puesto que yo prometí una bajada de impuestos que aplicaré el 1 de enero de 2024, y por eso hay que buscar consensos y soy consciente de esta realidad”.

No obstante, señaló que hasta el día 17 de junio, cuando se constituyen los nuevos consistorios, “van a ir hablando” porque habrá que ver cómo afecta el adelanto de las elecciones generales a los posibles pactos y negociaciones.

Como bien apuntó Catalá, el pleno del Ayuntamiento consta de 33 ediles, por lo que mayoría absoluta se obtiene con 17. Así pues, será complicado que pueda alcanzar acuerdos de calado con los partidos de izquierdas, entre los que Compromís ha sacado 9 concejales y el PSPV 7. De esta forma, está a expensas de lo que decida Vox, fuerza que a buen seguro exigirá entrar en el Gobierno municipal para contar con su apoyo. De lo contrario, es poco probable que la formación de extrema derecha pueda apoyar a los populares en unos presupuestos municipales o en proyectos importantes, lo que complicaría mucho la gobernabilidad de la corporación municipal.

En este punto también puede influir lo que suceda en las Corts Valencianes entre los populares y Vox, donde Carlos Mazón también necesita el apoyo del partido de Santiago Abascal, y su líder valenciano, Carlos Flores, ya ha dejado claras sus intenciones de entrar en el Gobierno valenciano. En esta negociación podría entrar también la configuración del Ayuntamiento de València.

Bajada de impuestos, más limpieza y más policías

La próxima alcaldesa de València, María José Catalá, comentó que lo primero que hará es solicitar un traspaso de delegaciones y de competencias con la actual corporación, que se mostró segura de que será “tranquila y normal” y “a partir de ahí, entablar conversaciones con la actual corporación y los grupos que han obtenido representación”. De hecho, destacó que ya habló la noche del domingo con el alcalde en funciones, Joan Ribó, en una conversación “muy cariñosa” en la que ambos se dieron la enhorabuena por la campaña y la felicitó por su victoria.

Catalá anunció que sus primeros 100 días como alcaldesa van a estar centrados en poner en marcha una bajada de impuestos, un plan de choque de limpieza, sacar oposiciones para poner 500 policías más en la calle y empezar a construir vivienda pública para que los jóvenes puedan emanciparse y desarrollar su proyecto personal y profesional.