El PP de Asturias se desliga del indulto de Gallardón al guardia civil que grabó una agresión sexual

La presidenta del Partido Popular en Asturias, Mercedes Fernández, ha desligado a su partido del indulto concedido por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, al guardia civil asturiano M. A. G., condenado por la Audiencia Provincial a una inhabilitación de seis meses por grabar en su móvil una agresión sexual en el vagón de un tren, mientras se mofaba de la víctima.

Fernández asegura que “lo que haga una persona en su defensa no nos corresponde decirlo a nosotros”, sino que tendrá que ser ella “la que explique sus razones para solicitar el indulto”. El padre del guardia civil indultado, es concejal por el PP en el ayuntamiento de Lena y secretario general del partido en esta localidad asturiana. J. M. A. fue el encargado de recoger más de dos mil firmas a favor del indulto.

El padre del joven guardia civil también ha querido limitar el asunto al ámbito personal y acusa al PSOE de querer sacar rédito político a un “asunto que es estrictamente personal”. La secretaria de Igualdad del PSOE, Purificación Causapié, ha exigido al Gobierno que retire la medida de gracia que conmuta por una multa de 540 euros la sanción de seis meses de inhabilitación, que suponía la expulsión de la Benemérita.

Entre los firmantes está el alcalde de Lena de IU, Ramón Argúelles, que se muestra compungido y engañado con la recogida de firmas. “No se nos dijo toda la verdad. Se nos explicó unos hechos que nada tienen que ver con lo que está saliendo ahora. Se nos dijo que ese chaval pasaba por ahí, que no conocía a la otra persona, como que había cometido un error accidental. Ahora estamos viendo que lo tiene grabado en el móvil”.

Los hechos que condenaron la Audiencia Provincial se remontan a junio de 2009, cuando M. A. G. tenía 23 años. Tras una noche de fiesta en Gijón, toma junto a un amigo el tren con destino a Oviedo. Los dos se sentaron al lado de una vecina de Gijón y el amigo del guardia civil, que estaba de permiso pero en activo, comenzó a hostigar a la mujer con frases y acciones “de inequívoca intencionalidad sexual”, según la sentencia.

Tras las frases soeces y denigrantes, el joven “le metió mano entre las piernas, tocándole la zona del pubis por encima del pantalón, con el rechazo de la mujer que intentaba evitarlo, abandonando el lugar en el que se encontraba. Cuando se levantó para alejarse, le tocó la entrepierna”, dice textual la sentencia. Un hombre, que viajaba en el mismo tren, intervino para poner fin al acoso y fue agredido.

Mientras todo esto sucedía, el guardia civil M. A. G. no intervino y se reía, incluso llegó a grabar en su móvil las palabras de su amigo a la mujer. Tras el indulto del ministro de Justicia, el joven se enfrenta al reglamento interno del Cuerpo por un falta grave, que supone la suspensión de empleo y sueldo por un periodo de entre cinco días y seis meses.