Julio Tomás, republicano, apátrida y víctima de los nazis
Julio Tomás Codina se convirtió en apátrida por obra y gracia del gobierno Franquista. Vecino de la Pobla Llarga, defendió el gobierno de la República desde el ejército y, como miles y miles de castigados, se vio en la obligación de cruzar los Pirineos para sobrevivir. Al otro lado, pasó sus días de campo de trabajo en campo de trabajo, en condiciones ínfimas, ayudando a levantar la línea Maginot. Su futuro en una Europa conquistada por el fascismo y el régimen nazi no fue mejor; llegó el día en el que lo subieron al tren con destino Mauthasen. Después, a Gusen.
La historia de Julio la cuentan un grupo de alumnos de la Universitat Politécnica en Apátrida. Dirigido por Jordi Company, con guión de Judith Lorente, producción de Laura Pérez y Aline Garcia y diseño de sonido de Francesc Bosch y Arnau Múria, el documental es, según sus creadores, una de las pocas piezas sonoras que tratan la memoria histórica. “Nuestra intención es trabajar la memoria histórica a través de la no ficción sonora”, explica Company, que se empeñó en contar la historia de Julio.
Empezó en octubre como un proyecto de clase de varios estudiantes de la Universidad Politécnica, de un grupo de chavales a los que les interesaba la radio y buscaron un tema de interés para realizar un podcast. En lugar de optar por un monográfico de actualidad, los estudiantes decidieron contar una historia sobre la memoria. Y la historia fue la de una víctima de los campos de concentración.
Conoció el relato por Ximo Vidal, cronista de la banda municipal de La Pobla Llarga. Vidal, que participa en el programa, comenzó a investigar a algunos vecinos para el libreto de la agrupación musical y encontró algunas incongruencias sobre el caso de Tomás. El cronista contactó con la familia del fallecido y en 2012, tras años de investigación, publicó una pequeña biografía del hombre.
Los pasos de Ximo Vidal fueron los que siguieron los estudiantes para construir el relato de la trayectoria vital de Julio. Con ayuda de otros investigadores como Adrián Blas, de la Amical de Mauthausen,y el relato imprescindible de las nietas de Tomás, que les facilitaron cartas, testimonios, fotografías y toda la información que recabaron de su abuelo. “Están muy agradecidas porque le han puesto voz ”, comenta Jordi, que ya las considera como una segunda familia junto al equipo. Grabado entre las horas lectivas en las que les prestaban el estudio de radio y otras tantas horas de su tiempo, a finales del trimestre Apàtrida surcó las ondas radiofónicas.
El objetivo del grupo es hacer una serie de episodios si alguna productora se interesara por la cuestión, ya que no disponen de medios materiales ni económicos para desarrollar más contenidos. Tampoco quieren arriesgarse con un Verkami u otras plataformas de micromecenazgo por el riesgo de quedarse sin fondos antes de acabar el proyecto. Aunque, de momento, los estudiantes no se frustran. Se presentó al público el 25 de enero, en un acto que organizó la Politécnica y posteriormente en el auditorio municipal, con una tierna acogida entre los vecinos. “Con haber emocionado a 100 personas, nos damos por satisfechos”.