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Euskadi elimina mamparas, precintos y sectores en sus centros de salud pero mantendrá una franja para pacientes con “síntomas respiratorios”

Una señora sale del ambulatorio donostiarra de Gros

Iker Rioja Andueza

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La consejera de Salud, Gotzone Sagardui, ha eludido ante los medios de comunicación fijar plazos concretos para la prometida reunión de la mesa de crisis de la emergencia sanitaria de Euskadi, el órgano conocido como Labi, y que desactivaría precisamente ese marco excepcional vigente desde mediados de agosto de 2020. Ni siquiera el anuncio de Navarra de poner fin a todas las medidas salvo las que son mínimos del Ministerio de Sanidad cambia el ritmo al Gobierno de Iñigo Urkullu, que mantiene que este nuevo “paso” se producirá a principios de octubre. Lo que sí ha detallado Sagardui es la relajación de algunas medidas en ambulatorios y hospitales de Osakidetza tales como mamparas, precintos en salas de espera o zonas sectorizadas para casos de COVID-19 (limpias y 'sucias' en el argot sanitarios). El cambio se traduciría en que de aquí a final de año se debería recuperar la presencialidad en las consultas previa a la llegada del coronavirus, que en los ambulatorios era del 65% de los actos médicos, según ha precisado.

Sagardui ha dicho que la Sanidad vasca “entra en otra fase” y que se pone fin a algunas cautelas que “limitaban la presencialidad”. Ahora mismo, según sus cálculos, las consultas físicas son el 50% del total y se aspira a regresar al 65% de 2019, aunque dejando claro que la atención telefónica para solventar dudas o actos médicos más sencillos “ha venido para quedarse”. Los centros de salud, eso sí, van a mantener una franja horaria para atender a personas con “síntomas respiratorios” -pronto también se iniciará la campaña de control de la gripe estacional- y ese colectivo deberá utilizar mascarillas “sí o sí”. La titular de Salud ha apostado también por mantener para siempre la limpieza obligatoria de manos en los accesos y por reformular el sistema de reserva de citas para combinar las modalidades tradicionales presenciales y telefónicas con fórmulas a través de la web dado lo bien que ha funcionado el sistema establecido para la vacunación contra la COVID-19. Con carácter inmediato también se van a permitir acompañantes en las consultas -sobre todo para personas mayores- y más visitas en los hospitales.

La desescalada incluye también el cierre de los grandes vacunódromos desde el 30 de septiembre, una decisión logística “acertada” para atender una gran demanda, en palabras del Gobierno. En el BEC, La Casilla, Illunbe, Landako o el frontón de Lakua se han puesto más dos millones de vacunas, el 63% del total, y ahora se apostará por un modelo de “centros intermedios” o incluso por vacunas en los ambulatorios para completar la campaña. El 88,4% de los vacunables (mayores de 12 años sin contraindicaciones) ya tienen la pauta completa. Sagardui ha dejado claro que esta nueva fase no supone el final del proceso de inmunización y, de hecho, se ha dirigido a los rezagados: “Por favor, que se lo piensen y procedan a pedir una cita cuanto antes”. Queda pendiente de precisar cómo se ajustará a la nueva realidad el equipo de vigilancia y rastreo, que llegó a tener hasta 700 personas.

Por segundo día consecutivo, la consejera Sagardui ha cambiado su “Vamos bien pero no estamos bien” por lo que parece su nuevo mantra, “Vamos bien y estamos cerca de estar bien”. De hecho, ha puntualizado que algunos indicadores que habían sufrido un ligero repunte este lunes han vuelto a descender, principalmente la tasa de incidencia acumulada a siete días. El parámetro más habitual, esa tasa a catorce días, prosigue la senda descendente y se queda en 83,74. La propia consejera ha remarcado que es el mínimo de toda la segunda emergencia sanitaria. En el caso de los mayores de 65 años baja incluso a 65,34.

En las últimas 24 horas han aparecido 100 contagios más de COVID-19. La tasa de positividad es del 1,4%. Los casos se reparten en 53 en Bizkaia, 36 en Gipuzkoa y solamente nueve en Álava. En los hospitales hay 124 personas ingresadas, 39 de ellas en estado crítico en la UCI. La consejera, en todo caso, ha destacado que la caída de la incidencia también se aprecia ya claramente en los hospitales. La media de ingresos en la última semana es de 20 diarios y en los últimos tres días han sido 13, 11 y 15, respectivamente.

En nuestros especiales interactivos, se pueden consultar todos los datos sobre la evolución de la pandemia en Euskadi, sobre los positivos y fallecidos en todas y cada una de las residencias de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa y el avance día a día de la campaña de vacunaciónTambién tenemos mapas con los brotes más destacados.

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