El vino alavés y el reto de afrontar el arancel del 15% en las ventas a Estados Unidos

El sector del vino alavés afronta un futuro incierto. El arancel del 15% para las exportaciones a Estados Unidos, confirmado este pasado jueves, abre un periodo de gran incertidumbre, ya que el mercado norteamericano es una parte muy importante de las ventas de este sector. De hecho, es el segundo mercado en volumen y el primero en valor. Si no se produce ninguna modificación rápida, el arancel entrará en vigor el próximo jueves 7 de agosto. Estaba previsto su puesta en marcha este mismo viernes, con el inicio del mes, pero en una de sus habituales carambolas, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado el retraso de los aranceles una semana más. El arancel supone un duro varapalo para el sector, pero los productores todavía mantienen viva la esperanza de que se pueda acoger a la excepción para los productos agrícolas. “Hay que seguir negociando hasta que se agoten todas las vías”, dicen desde el sector y desde las instituciones.

“Estamos sumidos en la incertidumbre”, señala Nagore Etxebarriarteun, de Bodegas García-Olano. “No sabemos si finalmente la tasa va a entrar en vigor, porque llevamos siete meses dando vueltas al tema de los aranceles. Primero se hablaba del 100%, luego el 20%, ahora el 15%...”, recuerda. Su esperanza es que el vino entre finalmente entre dentro de la excepción a los productos agrícolas, y que la UE siga presionando en esa dirección con el impulso de países grandes exportadores de vino a Estados Unidos, como es España y Francia. “Si no es así, si se materializa el arancel, será un golpe muy fuerte para el sector”, recuerda, además en un momento crítico. “La cosecha de 2024 fue muy corta, la de 2025 más corta todavía”, lamenta, en un momento en el que están sufriendo también las consecuencias de las lluvias torrenciales y los daños del hongo mildiu. Una situación que llevará a un aumento de los precios para los consumidores y dificultará la venta, en un momento en el que “está bajando el consumo de vino a nivel mundial”. “Si a esto añadimos para las exportaciones a Estados Unidos un arancel del 15%, que va a repercutir en el precio, las ventas van a ser complicadas”. Y recuerda Nagore Etxebarriarteun que “es imposible para las bodegas asumir ese arancel sin repercutir en el precio de venta. ”A lo mejor hay bodegas que pueden pactar con el distribuidor asumir a medias el pago, pero la mayor parte lo tendrá que pagar en solitario la bodega y tendrá repercusión en el coste para el consumidor“.

De momento, ante la situación de incertidumbre sobre lo que va a pasar, ya se está produciendo una ralentización de las ventas en ese mercado. ¿Y qué hacer ante este momento tan complicado? “Hay que seguir negociando y presionando para que el vino quede fuera del arancel, pero sobre todo, hay que abrir nuevos mercados y potenciar el consumo de vinos alaveses en casa, en Euskadi. Eso es fundamental para que salgamos adelante”. dice la representante de la Bodega García-Olano.

Desde el Gobierno vasco, la consejera Amaia Barredo ya ha anunciado que convocará a los agentes del sector -productores de vino de Rioja, de Txakoli y Euskal Sagardoa, aunque estos dos últimos están afectados en menor medida- para buscar alternativas si se confirman los gravámenes del 15%. La titular de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca, es partidaria, en línea con lo que reclama el sector, de “agotar la vía diplomática y la negociación hasta el último minuto” con el fin de lograr que el vino quede excluido de los aranceles. De forma paralela, apuesta por “seguir abriendo mercados ante las continuas veleidades comerciales de EEUU”.

Desde la Diputación alavesa criticaron desde un principio el acuerdo arancelario de la UE con Estados Unidos. El propio Ramiro González, consideró que “no era un buen acuerdo para Álava”. En el caso del sector vitivinícola, González resalta la incertidumbre del sector. “Europa debe trabajar, debe hacer los mayores esfuerzos para que la vitivinicultura se asimile a la exención arancelaria aplicada al primer sector”, indica el representante foral.