Protestas en el hospital Padre Jofré de València por el traslado de los pacientes del centro que Sanidad ha ordenado cerrar: “Se producirá saturación”

Trabajadores, pacientes y familiares de los pacientes crónicos del hospital Padre Jofré de València se concentran para protestar contra el traslado de pacientes del Hospital Doctor Moliner de Serra, que la Conselleria de Sanidad efectuará el próximo mes de julio. Sanidad ha decidido derivar a 90 personas, pacientes de larga estancia en el centro médico, a otros dos hospitales valencianos, entre ellos el de la capital, que apunta que no puede asumir estos tratamientos.

El departamento que dirige Marciano Gómez ha decidido cerrar el centro hospitalario de pacientes crónicos, uno de los cinco que hay en territorio valenciano, para acometer las reformas en una sola fase, y distribuirá a los pacientes crónicos en dos centros: el Padre Jofré de València y el Hospital Militar de Mislata. La decisión se basa, según apuntó Sanidad, para salvaguardar la seguridad y eliminar cualquier riesgo potencial que pudiera derivarse de la reparación de los daños que presenta la infraestructura, en base a los últimos informes técnicos.

Este jueves, el personal del hospital Padre Jofré, dependiente del departamento de Salud del Doctor se ha concentrado para alertar de los riesgos que implica asumir a los pacientes crónicos de golpe en la misma infraestructura. El personal denuncia el “riesgo asistencial y laboral derivado de la duplicación de camas sin garantías estructurales, de personal ni de seguridad” y apunta que el traslado supondría hasta 30 ingresos adicionales.

La Junta de Personal denuncia la falta de adecuación de las instalaciones, así como la ausencia de refuerzos de plantilla acordes con el aumento de las cargas de trabajo y la modificación de las condiciones laborales. También alerta de las dificultades para utilizar ayudas técnicas en la movilización de pacientes debido a la reorganización y la falta de espacio. Asimismo, se señala la ausencia de una evaluación completa de los riesgos laborales derivados de este incremento de pacientes en las condiciones actuales, y se considera inconcebible la inexistencia de un plan de emergencias actualizado que contemple esta nueva situación. “Las habitaciones fueron diseñadas para un solo paciente, y su sobreocupación comprometería gravemente la movilidad interna, la seguridad del personal y el bienestar de los pacientes, especialmente de aquellos en situación de cronicidad o cuidados paliativos”, sostienen los representantes de la Junta de Personal en un comunicado.

En el documento, advierten que advierte que “se producirá una inevitable saturación de mobiliario en los pasillos, vulnerando los principios de accesibilidad y evacuación en caso de emergencia establecidos en la normativa vigente”. El personal pone el foco en que la atención a los pacientes, en un estado de vulnerabilidad considerable por su condición de crónicos, se verá afectada por el aumento de carga de trabajo: “Compromete la calidad de los cuidados y la seguridad del centro”, aseguran. El personal reclama a Sanidad que reconsidere la decisión y exige que “cualquier ampliación de la capacidad asistencial se lleve a cabo con planificación, garantías legales y reformas estructurales adecuadas”.

Sanidad reforzará el centro con 48 trabajadores

Fuentes de la Conselleria de Sanidad han informado a EFE de que están trabajando en la adecuación de los espacios de acuerdo con las indicaciones de los servicios de prevención de riesgos y de Medicina Preventiva del departamento de Salud al que pertenece el Hospital Padre Jofre.

Destacan que el proyecto original del edificio hospitalario ya contemplaba dos camas por habitación, aunque señalan que sólo se instalarán dos camas en aquellas habitaciones en las que el espacio lo permita. Sanidad apunta, en las mismas declaraciones remitidas a la agencia EFE, que 48 profesionales del Doctor Moliner irán al Hospital Padre Jofre para reforzar la atención.